Arabia Saudí castigará con la pena de muerte la posesión de perros salvo los de caza y vigilancia en algunas viviendas
Arabia Saudita castigará con la pena capital la posesión de perros en las casas. Sólo se aceptarán los canes para funciones de caza o de vigilancia en algunas residencias. El Presidente de la Comisión para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio, conocido como muttawa o policía religiosa, explicó que la medida se ajusta a los preceptos indicados en el Corán, el libro sagrado de los musulmanes.
Arabia no es el primer país musulmán que criminaliza la tenencia de mascotas. A través del ayatolá Nasser Makarem Shirazi, la República Islámica de Irán anunció recientemente la prohibición de tener perros en las casas. “Indudablemente el perro es un animal inmundo”, sentenció el ayalolá, quien agregó: “No sólo no puede ser sacado a paseo, ni siquiera ser tenido dentro de los muros de casa o en el jardín propio.
Sólo el Presidente Ahmadineyad tiene derecho a tener cuatro perros. La razón es que son perros guardianes. Su compra hace unos años en Alemania, al precio de 110.000 euros cada uno, fue muy criticada entre los iraníes. El propio Ahmadinejad hizo emitir una fatua en la que se recogía su derecho a poseer cuatro perros “porque su uso sólo es limitado a garantizar su seguridad”, dice la directriz. Nada de acariciar sus cabezas ni de sacarlos a paseo por el parque. “Las relaciones amistosas con los perros son una ciega imitación de las costumbres occidentales”, añade Makarem Shirazi, “los occidentales quieren a sus perros más que a su mujer y a sus hijos”.
Los controvertidos hadices
¿Qué tienen en común las mujeres, los burros y los perros? Que los tres tienen la capacidad de anular la oración del musulmán. Eso es al menos lo que un famoso y controvertido hadiz afirma que un tal Abd Allah ibn al-Samit dijo que un tal Abu Dharr dijo que (su primo) Mahoma dijo que Alá le había dicho. Los hadices o dichos del profeta se encuentran sólo un peldaño por debajo del Corán, por lo que el asunto de la equiparación de mujeres, burros y perros sigue debatiéndose hoy en el mundo islámico con la misma intensidad con que avergüenza a los musulmanes más sensatos. Más allá de la ubicua fijación islámica con los perros, en realidad, este hadiz no advierte contra los perros en general, sino contra los perros ‘negros’ en particular. Porque si, para algunos imanes, incluso en Occidente, “las mujeres son el arma de Satanás” (ND), para el orden islámico del universo los perros negros -no los “amarillos” ni los “rojos”, según se especifica- son “demonios”. Por eso, la presencia de perros no es tomada en broma. Y en Estados Unidos hay muchos perros. Y también muchos musulmanes que no los pueden ni ver. Ni tan siquiera cuando sirven para que un ciego vea.
En efecto, hay muchos musulmanes que no los pueden ni ver, ni tocar. Como mucho, hay algunos que los tocan pero sin tocarlos. El mejor recuerdo del estadounidense Tyler Hurd, de 23 años, proviene de cuando, en el primer centro universitario en que estudiaba educación especial, los estudiantes somalíes acariciaban a su perro Emmitt poniéndose un papel en la mano para no contactar físicamente con el pelo del animal. Hasta ahí la cosa iba más o menos o bien. Porque cuando Tyler se cambió de centro a la Universidad de St. Cloud con el fin de continuar su especialización, comenzaron las amenazas directas contra él y contra su perro, hasta que, finalmente, las advertencias genéricas se convirtieron en un aviso de ejecución sumaria del perro Emmitt. Perro negro, para más señas.
Amenazas de muerte a un perro de servicio
Emmit no es simplemente la mascota de Tyler, sino un perro adiestrado para prestar ayuda a su dueño en los frecuentes ataques epilépticos que padece. Como los lazarillos de los ciegos, va debidamente identificado y porta una bolsa con medicinas e instrucciones para que los viandantes puedan socorrer a Tyler. Las amenazas provocaron que el estudiante se viera obligado a abandonar la universidad. Un reportaje en el periódico del centro desveló su caso, que pronto saltó a los medios generales. Además, todo esto no sucedía en cualquier estado, sino en el de Minnesota, donde una masiva inmigración somalí de religión mayoritariamente musulmana ha provocado graves encontronazos con la forma de vivir occidental hasta el punto de tratar de imponerse a ella. Y de conseguirlo, en muchas ocasiones.
Con un conflicto tan flagrante, el virulento Consejo de Relaciones Islamo-Americanas (CAIR, por sus siglas en inglés) se ponía en marcha en un intento de controlar los devastadores daños de imagen. En un comunicado, la organización afirmaba: “La moral y la necesidad legal de acomodar a personas que utilizan perros de servicio sobrepasa con mucho la incomodidad de un musulmán individual que tema entrar en contacto con un perro, que es una criatura de Dios”. La organización desmentía la creencia general de que los perros sean considerados “impuros” por los musulmanes, y aclaraba, por el contrario, cómo “los musulmanes creen que la saliva de los perros invalida la ablución ritual antes de la oración”.
Mujeres, burros, perros… y judíos
Es una versión. De hecho, las interpretaciones de los hadices se prestan a ellas. El de las “mujeres, los burros y los perros” (número 1032) -que también invalidarían la oración como la saliva de los perros- es interpretado por algunos como que es “el paso” de cualquiera de las tres criaturas el que distrae por igual al orante, por lo que la plegaria quedaría invalidada, sin que, por ello, Alá o sus transmisores tuvieran intención de equiparar a mujeres, burros y perros. En realidad, la cosa se complica mucho porque algunos piensan que son sólo las mujeres que tienen la menstruación las están concernidas en todo este asunto… Y otro hadiz incluye a los judíos entre las criaturas cuya mera aparición malogra las plegrias. No son discusiones medievales. En realidad, son temas que se discuten todos los días no sólo en el Medio Oriente, sino en países occidentales y por musulmanes en idiomas occidentales, incluido el español en medios islámicos españoles.
El propio CAIR recordaba el grave conflicto que se planteó en el servicio de taxis de Minneapolis, la principal ciudad de Minnesota, cuando los conductores, mayoritariamente somalíes, se negaron a dejar subir a los invidentes que fueran acompañados de perros lazarillos. La organización islámica dice que todo se solucionó, pero aquel era sólo uno de los constantes problemas con que la comunidad islámica somalí, en puestos y servicios públicos, intentaban e intentan imponer sus normas y prohibiciones religiosas a la aplastante mayoría de la población. Por ejemplo, en Minnesota, una de las principales procesadoras de carne tenía graves problemas para mantener la producción después de que su plantilla -mayoritariamente somalí- abandonara los puestos de trabajo al mismo tiempo para rezar. Con el resultado de una cadena de producción detenida cinco veces al día (ND).
Pakistán: los perros policía también son impuros
En este entorno, los perros -y no sólo los de compañía, sino los de asistencia a personas minusválidas o con graves problemas de salud- se han convertido en un activo frente de guerra en el choque de civilizaciones, en el que la americana ha caído bajo la sharia, al menos en Minnesota. Y es que lo de los perros sigue presente en la mentalidad musulmana. Este mismo mes, un prominente imán pakistaní emitía una tonante fatua contra el uso de perros policía, entrenados para rastrear droga o explosivos. Poniendo de testigo a la sharia, Maulana Abdul Hakim Haqqani no sólo desmentía que una prueba policial conseguida con perros tuviera validez, sino ‘recordaba’ que los “perros y los cerdos” son las “criaturas favoritas de los judíos”.
De los judíos, y de los egipcios. O al menos eso debían pensar unos avispados carniceros cairotas recién descubiertos sirviendo a sus clientes carne de -precisamente- perros y burros, y haciéndola pasar por carne de res. De nuevo se levantaba uno de los extraños y extravagantes debates médico-socio-teológicos habituales en el orbe musulmán, cuando un veterinario defendía que nada perjudicial hay en la carne de burro, y un profesor de ley islámica contestaba que “el islam prohíbe comer carne de cualquier animal considerado impuro, como el burro, el cerdo o el perro”. Un sarcástico vecino de los carniceros preveía que una mañana se iba a levantar ladrando… o rebuznando. En Minnesota, quizás ni tan siquiera eso.
Se inventaron los hadices son una farsa, son cuentos de cosas quizás nunca dijo el profeta Mahoma y los musulmanes tienden a caer en supersticiones igual que los judíos con el Kapparot golpeando pollos para transferirle sus pecados, todas estas prácticas son propias de falsos creyentes son propias de malos practicantes.
esta gente junto con los chinos, lo peorcito se creen con el derecho de tratar a los demas como si fueran caca!!!
la verdad esta clase de gente junto con los chinos…..lo peor de lo peor, se creen Dioses
Cuanta incultura por favor ,la gente habla sin saber absolutamente nada,nosotros los cristianos asta hace 40 años los matavamos y nada tenía perros en sus casas o una pequeñísima parte y ahora vamos de salvadores y que nose que y que nose cuanto,cuanta gente los abandona o los matan pastores gente de pueblo a día de hoy siendo cachorrros y vemos ahora a un gilipollas que a puesto una ley en su país y ya le echamos la culpa al Islam venga e iros la mierda hombre un poco más de cultura leer un poco en fin,Y ahora los latinos… Leer más »
Por muy escoria o gentuza que sean, algo bueno tienen.
Y a la gente que tanto defiende a los musulmanes, sepan que en eso de los perros yo talbién les defiendo.
Islam doctrina malvada.perversa maligna.destructora y autodestructiva. Es la plaga y la peste de este planeta. El islam debería desaparecer de la faz de la tierra. Incompatible a la luz de la verdad y razón. Muera El.islam.
Este hombre de la foto q’ le va a dispara al perro está en París como es posible ese país permita esto?Castiguen a este hombre q’ haga esto en su país con es ideas no debería estar allí!!
Este hombre de la foto está en París debería ser castigado sus creencia q’ vaya y las practique en su país!!ES que están locos al permitir esto!
Hay hijos de su puta madre yo no soy de ahí pero ojala así como castigan a los pobres perritos inofensivos asi les cortaran la cabeza y los huevos para ver que se siente a ellos pero todo en esta vida se paga y si firmaron para torturar a los animales pues Dios los va a torturar de una manera peor todavía Justicia en él pueblo no hay pero hay un Dios que tarde o temprano la hace
No hay que jugar con la vida de nadie Maldisimos pendejos que se decapiten entre ellos mismo hijos de la gran madre
Pobres perros porque a vosotros no hos gustaría que os torturasen asi a que no
Como son sers indefensos y ellos tiene tanta rabia dentro que tienen que pagarlo con algo o con alguien, por mi parte una buena bomba atómica metida por donde no sale el sol me bastaría para hacerme feliz, malditos, malditos seres que se creen superiores en su fe para maltratar vidas indefensas,cuidar a vuestros animales la cosa no hace mas que empezar.un beso a todos vosotros que amas los animales y la vida.
Arabia una panda de barbaros y tu Juan un bocazas
Que discusión mas absurda, el Islam inventado que practican estos zoquetes debería estar prohibido en los países a donde ellos libremente y valiéndose de nuestros valores deciden venir e imponer sus estupideces, si se lo consentimos somos sus cómplices. Por mi que crean lo que quieran pero que respeten obligatoriamente nuestros valores y si no les gustan pues por donde vinieron que se vayan y vivan felices en sus países con sus malignas creencias.
A ellos si que los mataba yo que tiene que ver ahora los perros 1 los mierda maltratore y ahora estos puff
Dios mio como se puede ser tan malditos.
Gentuza de mierda, que se queden en sus países de escoria como ellos y que no vengan hacia aquí, que asco tango giliprogre y tanta imbecilidad, el que quiera esta gentuza que se los meta en su casa o los mantenga ellos.
Este mundo actual está cada vez más denigrado en valores y sentimientos, unos luchamos por el bienestar de los animales, otros cometen estas atrocidades, estas culturas ya son enfermas de maldad… China, Corea del Norte y ahora Arabis Saudita, que se puede hacer para evitar esto, es un dolor e impotencia sabiendo que son otras costumbres, muy temibles…
No me lo creo hasta donde la locura de querer matar seres vivos? Y ellos a ver si piensan martarse por boludos no?
Qué asco de país Arabia Saudita!!! Las mujeres no pueden manejar!!! Y ahora no se pueden tener perros!!! Vayansen a cagar forros!!!
Arabia Saudï es una dictadura terrible. Un país de fanáticos extremos y de una gran hipocresía. PERO LOS PAISES OCCIDENTES SOMOS SOCIOS Y ALIADOS DE ESTA IGNOMIA, OJO!!!!
Un perro vale más que 100 musulmanes
De acuerdo. Cada 100 musulmanes un perro estorba.
Horrible human being .disgusting