Lo que el viento se llevó y lo que de venganza aportó el proceso del “caso Nóos”
En el proceso, y las correspondientes sentencias de la Audiencia de Palma de Mallorca y de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, en el mediático juicio contra el matrimonio Borbón-Urdangarín, quiero resaltar dos claves del asunto que ponen de manifiesto que ni el procedimiento ni las correspondientes sentencias se ajustan a Derecho, vulnerado además el principio constitucional de que todos los españoles somos iguale ante la Ley.
Hubo actuaciones extraprocesales, por no decir otra cosa, debidamente explicadas por numerosos autores y periodistas, y que por lo tanto ya son del dominio público, destinadas a “Salvar a la Infanta”.
Para ello se utilizaron todo tipo de presiones, coacciones, amenazas e influencias, destinadas a conseguir el dictado de una sentencia absolutoria para la Infanta, como así se consiguió, finalmente.
– Reseñaremos algunos aspectos importantes que el viento se llevó de la sentencia:
1º. – La no acusación, y por consiguiente condena, del ex Alcalde de Madrid, don Alberto Ruiz-Gallardón, por haber concedido una subvención de 114.000 euros a Urdangarín para promocionar el Madrid Olímpica 2016, a cambio de dos folios manuscritos por la Gerente Mercedes Cohen.
2º. – La no imputación, acusación, y por consiguiente condena, de doña Rita Barberá, qepd, y don Francisco Camps, por las subvenciones millonarias a Urdangarín.
3º. – De haberse imputado a esos políticos, en su condición de aforados, el Juez Castro tendría que haberse inhibido en favor del Tribunal Supremo.
4º. – Los delitos de blanqueo, organización criminal, administración desleal, etc., tendrían que haberse incluido en los escritos de acusación.
5º. – La Infanta tenía que haber sido considerada, y por lo tanto condenada, como cooperadora de dos delitos fiscales, como mínimo.
6º. – Hacienda no somos todos, y por si nos quedaba alguna duda, lo dejó bien claro la abogada del estado.
7º. – La impunidad e inmunidad del Rey Emérito le evitó ser llamado al proceso, por el préstamo escandaloso a su hija para la compra del Palacete de Pedralbes.
8º. – La no investigación de los movimientos bancarios y financieros de Diego Torres y Urdangarín en los paraísos fiscales de Panamá, Belice, Islas Vírgenes, Delaware, etc.
9º. – La aplicación de la “doctrina BOTÍN”, creada ex novo para proteger a ese banquero, que creía estar, y en la práctica estaba, por encima de la Ley.
10ª. – Intimidación de la Fiscalía al que suscribe, pidiéndome nada menos que 24 años y 10 meses de prisión. – (Teniendo en cuenta que he cumplido 75 años, “necesito” llegar a los 100 para poder cumplir con la Patria…).
Lo que la venganza aportó al procedimiento:
1º. – La criminalización de Miguel Bernad y el Sindicato MANOS LIMPIAS, para deslegitimar la única acusación real –y nunca mejor dicho- contra la Infanta, intentado así su expulsión del proceso, evitando así que doña Cristina tuviera que sentarse en el banquillo de los acusados.
2º. – La participación de las “cloacas del Estado” en la operación, diseñando un “Plan para salvar a la Infanta”.
3º. – La figura del fiscal defensor de la Infanta, y de la abogada del estado que o defiende el interés público, sino solamente a la ciudadana Borbón.
4º. – Las nuevas figuras de la “mujer florero” y de la “hormona del amor”.
5º. – La falacia de la extorsión a Miguel Roca, cuando fue todo lo contrario.
6º. – La vergonzosa condena en costas al Sindicato MANOS LIMPIAS, la organización que más ha luchado –y sigue luchando- contra la corrupción en España.
7º. – Las amenazas y descalificaciones al Juez Castro, a la Letrada de Manos Limpias, la señora López-Negrete, y al que suscribe, Miguel Bernad, fundador y secretario general del sindicato.
8º. – La petición ¡de la ilegalización de MANOS LIMPIAS, como acusación popular!
9º. – La advertencia a “navegantes de que el sistema no permite que se traspasen determinadas “líneas rojas”, pues ello traerá funestas consecuencias a quienes osen hacerlo.
10º. – La persecución de esa policía política llamada UDEF, no de los denunciados, como sería lo lógico, sino de los denunciantes, algo que sospecho solo pasa en Cuba, Coria del Norte y algunas “democracias” similares, como España.
Quiero terminar esta exposición con una manifestación valiente de la juez doña Mercedes Ayala:
“Hay una justicia para ricos y otra para pobres”.
La sentencia del caso Nóos avala estas declaraciones de la señora Ayala.
*Jurista y secretario general de MANOS LIMPIAS.
Excelente artículo, que pone los puntos sobre las ies del caso.
Es obvio que a ella se la ha eximido de toda culpa en cualquier grado deliberadamente.