El trilero Sánchez, en enero: “El mantenimiento del empleo en la planta de Nissan en Barcelona está garantizado”
El fabricante japonés de automóviles Nissan, como parte de su nuevo plan estratégico a medio plazo, ha decidido cerrar su planta de producción de Barcelona, lo que supondrá el recorte de los cerca de 3.000 puestos de trabajo directos con los que cuenta la instalación. Este anuncio se produce después de semanas de rumores de cierre de la instalación catalana, cuya plantilla estaba en huelga desde el pasado 4 de mayo.
El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha lamentado la decisión de la compañía japonesa Nissan de “dar por finalizada su presencia en Cataluña” y ha propuesto la creación de un grupo de trabajo para estudiar “escenarios alternativos” que garanticen la continuidad de la actividad industrial. El Gobierno considera que la continuidad de la planta de Barcelona “es posible”, tal y como recoge el plan de viabilidad que presentó el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo hace unos meses en colaboración con la Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consorcio Zona Franca. Asimismo, destaca que la continuidad de la factoría de Barcelona “tiene sentido económico” para la compañía japonesa, puesto que el coste de cerrar la fábrica podría superar los 1.000 millones de euros, mientras que la adjudicación de un modelo eléctrico requeriría ‘solo’ 300 millones de euros.
La decisión de Nissan es un duro golpe para la economía catalana. Un desenlace acelerado por el coronavirus pero que ya comenzaba a dibujarse desde hace meses. La fábrica de la Zona Franca de Barcelona, la más importante de Nissan en España, fue perdiendo carga de trabajo de manera paulatina, lo que ha acabó a finales de 2019 con la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que planteaba 600 prejubilaciones. En paralelo, la dirección de la planta de Cantabria también presentó un ERE basado en prejubilaciones para hacer frente a la caída de la producción, que afectaba alrededor de 80 trabajadores.
Pedro Sánchez aprovechó el Foro Económico Mundial de Davos en enero para reunirse con el presidente de la alianza global Renault Nissan Mitsubishi, Jean-Dominique Senard. Según fuentes de La Moncloa, Senard se comprometió a que no habría despidos de trabajadores en ninguna de las tres plantas que tiene en territorio español. El presidente lo anunció incluso en un tuit: “El mantenimiento del empleo en la planta de Nissan en Barcelona está garantizado. Durante nuestro encuentro de hoy en Davos2020, el Gobierno de España y Nissan hemos reafirmado nuestra voluntad para seguir trabajando juntos para asegurar la viabilidad de la factoría”.
Por decir esas mentiras los políticos se tenían que ir a la mierda. Si en España hay mas listos que tontos, en las próximas elecciones, estos incompetentes tenían que fracasar.
Pues el empleo de garantizado nada, es más : está verde…
A los liberados de las mariscadas sindicalista, a lo peor los colocan de probadores de los banquetes de El Chepas o de El Peluquines, como hacia esa mala bestia de Stalin que tenía a decenas de ellos, para prevenir su envenenamiento.
A los desmás ajo y agua, disfrutad de lo votado
Este Sánchez hubiera sido buen telonero de Chiquito de la Calzada, que en paz descanse.