George Bush y Cherie Blair discutieron acaloradamente sobre la pena de muerte
Cherie Blair, esposa del ex primer ministro del Reino Unido Tony Blair, y el ex presidente de EEUU George W. Bush tuvieron una acalorada discusión sobre la pena de muerte durante una cena, según revela el propio Bush en sus memorias.
El hijo de 17 años de los Blair, Euan Blair, tuvo que intervenir para calmar los ánimos en la discusión entre Cherie, abogada de derechos humanos, y Bush, según el diario británico The Times, que esta semana ha comenzado a publicar por entregas las memorias del político republicano. “Dale a ese hombre un respiro, mamá”, le pidió Euan Blair a su madre después de que ésta recriminara a Bush su postura a favor de la pena capital.
Este fue el momento más tenso vivido entre las dos familias, según cuenta Bush en sus memorias, en las que define a Tony Blair como “su socio más próximo” y “su mejor amigo en la escena internacional” y a la mujer de éste como una “contrincante” verbal en el debate sobre la pena de muerte. “Cherie dejó claro que no estaba nada de acuerdo con mi postura sobre el tema. Tony la miró un poco incómodo, yo escuché sus argumentos y luego defendí los míos. Ella refutó todos mis argumentos y, desde ese momento aumentó mi respeto por esa talentosa abogada”, comenta Bush en el libro.
Bush también cuenta cómo se conocieron las dos familias, en Camp David en 2001 y, según dice, su esposa Laura y él enseguida percibieron buena sintonía con los Blair. “Después de cenar decidimos ver una película. Todos estuvimos de acuerdo en ver Meet the parents (Los padres de ella) -una comedia protagonizada por Robert de Niro y Ben Stiller- y en ese momento supe que los Bush y los Blair nos íbamos a llevar bien”, señala.
“Tu hombre tiene cojones”
En Decision Points, su libro de memorias, Bush cuenta de Tony Blair que, cuando comenzaron a tratar el tema de una posible invasión de Irak, escuchaba en la voz de su amigo “ecos de Winston Churchill”. Bush reconoce que quedó impresionado por el “coraje” de Blair y que en una ocasión le dijo a Alistair Campbell, portavoz del gobierno laborista de Blair: “tu hombre tiene cojones”, utilizando esta palabra española.
“No sé cómo traduciría Campbell esa expresión ante los refinados oídos de Downing Street”, comenta Bush, que explica que la conversación que mantuvo con su amigo Blair tras los atentados del 11-S en las Torres Gemelas de Nueva York ayudó a cimentar la amistad que se había gestado unos meses antes entre estos dos líderes.