Marta Domínguez guardaba viales (inyectables) de tres tipos en su casa, así como varios frascos sin etiquetar, que ya han empezado a analizarse. Las pruebas determinarán si se trata de hormonas, EPO u otro tipo de sustancias dopantes, pero los investigadores están convencidos de que la atleta -ahora fuera de competición por su embarazo- se las proporcionaba a otros deportistas, de ahí el cargo de suministradora que le imputa la Guardia Civil.

La palentina no se lucró con esas prácticas, aunque el delito sería el mismo. En la vivienda se encontraron una serie de calendarios deportivos que los miembros de la trama utilizaban para elaborar un plan de dopaje.

Al principio, la campeona mundial de 3.000 obstáculos negó cualquier relación con el dopaje, pero al ver las pruebas que habían reunido los investigadores y tras el registro de su casa, se vino abajo. «Hay suficientes indicios contra ella», señalan fuentes de la investigación que han seguido sus movimientos y la han grabado durante los siete meses de la Operación Galgo. Marta Domínguez, en libertad con cargos, ve cómo su mundo se cae. Ayer, el Ayuntamiento de su ciudad, Palencia, retiró el encargo de levantarle una estatua. Un símbolo menos.

La investigación continúa abierta y alcanza al menos a una veintena de atletas de élite, la mayoría de ellos discípulos del laureado técnico Manuel Pascua Piqueras, también detenido el jueves. La Guardia Civil ya ha interrogado como testigos a tres campeones de Europa y pupilos de Pascua: Nuria Fernández, Reyes Estévez y Alemayehu Bezabeh. Este último, según fuentes de la investigación, ha admitido haberse dopado y ha sido apartado del Europeo de mañana. Sin embargo, Nuria Fernández sí participará en la competición de campo a través, ya que ha negado no sólo haberse dopado, sino también cualquier tipo de implicación en la Operación Galgo, a la vez que se ha mostrado dispuesta a colaborar.

«Nuria está conmocionada y espera que la Justicia actúe. Ya está colaborando», afirmó el marido y mánager de la atleta madrileña, Aser Pernil, mientras la Guardia Civil interrogaba a Reyes Estévez, Eugenio Barrios (especialista en 800 metros) y Digna Luz Murillo (velocista) por su relación directa con Pascua Piqueras y para determinar si han ingerido o no sustancias dopantes. Sus declaraciones también pueden servir para aportar luz a una investigación abierta el pasado mes de abril e impulsada por las confesiones de Paquillo Fernández a la Guardia Civil, aunque el marchador granadino desmintió ayer haber delatado a nadie.

La Guardia Civil, que tenía pinchados teléfonos, ha logrado averiguar que el doctor Eufemiano Fuentes, su hermana Yolanda y el ex ciclista de mountain bike Alberto León, ya imputados en la anterior Operación Puerto, lideraban también la ‘mafia’ del atletismo. «Tras recibir el calendario de competiciones por parte de entrenadores de ciertos deportistas, elaboraban un ‘planning’ de dopaje para éstos, tratándose en algunas ocasiones de productos dopantes como EPO, anabolizantes o esteroides y en otras, transfusiones de sangre reciclada del propio deportista», destacan fuentes de la investigación.

Además de atletas (Marta Domínguez y Alberto García), médicos, entrenadores y representantes, también fueron arrestadas dos farmacéuticas liberadas ayer. En el caso de Marta Domínguez, los investigadores grabaron una llamada telefónica en la que la palentina responde así a la petición de uno de los implicados en la trama: «Ahora no tengo». La mejor atleta española de la historia está atrapada en la red diseñada por Eufemiano Fuentes.

De momento, las pesquisas se han saldado con la detención de 14 personas, pero amenazan a un importante número de deportistas de alto nivel. Siete implicados permanecerán detenidos al menos hasta mañana, cuando declararán ante el juez: Eufemiano Fuentes (eje de la trama), Manuel Pascua Piqueras y César Pérez (entrenadores de Marta Domínguez), María José Martínez (esposa de Pascua y entrenadora), el atleta Alberto García, el ex ciclista de mountain bike Alberto León, y el culturista Miguel Barceló.

La Guardia Civil no sólo dispone de conversaciones telefónicas que inculpan a atletas y entrenadores, sino incluso de vídeos que muestran a médicos inyectando sustancias dopantes a conocidos deportistas, según anunció la Ser.