Habrá juicio contra Conrad Murray por la muerte de Michael Jackson
El juez Michael Pastor de la Corte Superior del condado de Los Ángeles informó que habrá juicio por el caso de la muerte de Michael Jackson en el que el médico Conrad Murray está acusado de homicidio involuntario.
La decisión del magistrado se produjo una semana después de que comenzara una vista oral en la que escuchó a una veintena de testigos relatar su versión de lo ocurrido al “rey del pop” el día que murió, el 25 de junio de 2009, y las jornadas previas.
En función de las pruebas presentadas por la fiscalía y los testimonios, Pastor consideró que existe base suficiente para sentar a Murray en el banquillo.
El que fuera médico de Jackson se enfrentará al cargo de homicidio involuntario y podría ser condenado a hasta 4 años de cárcel. Según los testimonios que se escucharon durante los últimos días en los tribunales, el “rey del pop” padecía una adicción a un potente anestésico de nombre propofol que utilizaba frecuentemente para ayudarle a dormir.
Murray se encargaba de obtener ese fármaco, de empleo en hospitales y bajo prescripción médica, y de suministrarlo a Jackson, quien al parecer llegaba a rogar para conseguir su dosis.
El día de la muerte del cantante, Murray trató de evitar que Jackson usara propofol y, antes de la dosis letal, le administró varios calmantes para que se durmiera, aunque no tuvo éxito. Esa jornada el cantante insistió para recibir lo que él denominaba su “leche” y llegó a amenazar con cancelar los ensayos de sus conciertos de julio en Londres si Murray se negaba a facilitarle la droga, según declararon algunos testigos.
La fiscalía argumentó que el doctor inyectó a Jackson propofol y durante las horas previas a su muerte desatendió a su paciente dedicándose a hablar por teléfono. Cuando regresó y se encontró al artista inerme, se demoró casi 25 minutos hasta que se alertó a los servicios de emergencia, según la acusación, porque se dedicó a recoger los rastros de medicamentos en la habitación de Jackson.
La fiscalía culpa también a Murray de ocultar a los sanitarios que Jackson había tomado ese anestésico. Durante la vista preliminar, la defensa de Murray planteó la posibilidad de que el “rey del pop” se hubiera auto administrado el propofol que le mató sin conocimiento de su médico. Según el informe forense, Michael Jackson falleció el 25 de junio de 2009 por una intoxicación aguda de fármacos, en especial propofol.
Michael Jackson era un racista con los negros, renegaba de su propia raza y encima era corruptor de menores.