El Supremo inhabilitará al consejero delegado del Santander por los delitos de presentación de acusación falsa y estafa procesal
La Sala Penal del Tribunal Supremo ha acordado condenar al consejero delegado del Banco Santander, Alfredo Sáenz, a ocho meses de prisión, multa e inhabilitación para ejercer cualquier ocupación en banca por los delitos de presentación de acusación falsa y estafa procesal cuando era presidente de Banesto.
Según la información que adelanta hoy El Mundo, cuando Sáenz presidía Banesto y “con su conocimiento y beneplácito” se presentó una querella por estafa y alzamiento de bienes contra cuatro empresarios catalanes “a sabiendas de que eran inocentes”. A resultas de esta falsa querella, que se utilizó, según el periódico, “como medida de presión para intentar cobrar una deuda de 3,8 millones de euros” contraída con Banesto por una empresa en la que participaban los querellados, éstos fueron detenidos y tres de ellos encarcelados durante varios días.
Los hechos ocurrieron en 1994, poco después de que Sáenz fuera nombrado presidente de Banesto, entidad que fue intervenida por el Banco de España en 1993 y adquirida después por el Santander. En diciembre de 2009, la Audiencia de Barcelona condenó a Alfredo Sáenz y a otros dos ex directivos de Banesto a 6 meses de prisión por los delitos continuados de acusación y denuncia falsa contra los empresarios.
Tras ser recurrida la sentencia al Supremo, el fallo del tribunal, que según El Mundo se votó el pasado diciembre y se conocerá en unos días, supondría la inmediata salida del ‘número dos’ del Santander de su puesto, así como de todos sus cometidos relacionados con la banca, en tanto que la pena de cárcel no se le aplicaría al ser inferior a dos años y no tener Sáenz antecedentes. Fuentes del Santander consultadas no han querido hacer comentarios sobre esta cuestión y han añadido que no lo harán hasta que no se conozca la sentencia.