La oposición dice que “la corrupción está enquistada” en la Argentina
Las nuevas filtraciones conocidas a partir de la difusión de más cables enviados por la embajada de Estados Unidos en la Argentina, generó repercusión y críticas desde la oposición.
El diputado peronista federal Eduardo Amadeo que “ahora nos podemos dar cuenta claramente que la inacción del Gobierno no es casual” sobre este tema.
Según Amadeo, “la ley de blanqueo que mandó aprobar Néstor Kirchner no es casual. Son instrumentos de apoyo a una estructura que ha inundado muchas acciones del Gobierno”.
El legislador peronista disidente analizó que “Ricardo Jaime necesitaba lavar el dinero de su corrupción, los empresarios amigos también. Para eso, se les creó una estructura”.
Y destacó que “esta historia recién empieza, van a aparecer muchas cosas más”, advirtió el diputado nacional.
Por su parte, la diputada nacional Patricia Bullrich que “la corrupción está enquistada en instituciones judiciales, políticas y policiales”, por lo que no le sorprenden estas nuevas revelaciones.
“Que lo de Manuel Garrido fue una vergüenza lo hemos dicho y lo hemos denunciado”, indicó la legisladora en relación al ex fiscal que investigó importantes casos y que se fue de su cargo hablando de una “impunidad casi absoluta” para la corrupción.
Pero Bullrich descree de analizarlo como falta de voluntad política en la administración nacional argentina para combatir los hechos de corrupción: “La frase de que no hay voluntad política es equivocada, pues el Gobierno es corruptor”.
“Acá es peor, pues el Gobierno es quien corrompe cuando hace un obra pública y le pide a los empresarios determinada cantidad de plata, cuando hace su campaña con la plata de la efedrina, cuando utiliza o se queda con parte de los subsidios, cuando permite tener un Jaime o un Capaccioli”, aseveró la diputada de la fuerza de Elisa Carrió.
Por su parte, el diputado Gustavo Ferrari indicó que estas nuevas revelaciones “lo que hacen es poner por escrito lo que todo el mundo en la Argentina comentaba y sabía”.
“Es vergonzoso estar en consideración de otros países por estos temas y no por otros, que merezcan reconocimiento”, aseveró.
Para Ferrari, las nuevas filtraciones conocidas vía WikiLeaks son “muestra de una decadencia que nuestro país debe superar”.
Por su parte, Ricardo Gil Lavedra dijo que “esto revela lo que todos sabemos: que la Argentina padece de un problema de corrupción estructural y que no existe en ejecución ninguna política pública destinada a prevenir este fenómeno”.
Según el jefe del bloque de diputados nacionales radicales, “la corrupción va degradando y destruyendo lentamente la democracia, porque va minando la confianza del pueblo en sus dirigentes”.
En diálogo con Clarín.com, Lavedra finalizó: al hablar de casos de corrupción en la actual administración “se está exteriorizando lo que todo el mundo sabe a gritos”.
Desde el PRO, la diputada nacional Paula Bertol señaló que “no necesitamos los cables de WikiLeaks para saber que en Argentina tenemos altísimos grados de corrupción. Los cables son más alarmas que siguen sonando mientras que los funcionarios que tiene que controlar miran para otro lado”, dijo.
También desde el PRO, Laura Alonso sumó que “no sorprende a nadie el informe de WikiLeaks, lo vienen diciendo organizaciones no gubernamentales internacionales y nacionales, respecto de la corrupción en la Argentina”.