Está demostrado científicamente que el sexo es beneficioso para la salud, así que no hay mejor regalo para el día de San Valentín que practicarlo con tu pareja. Después de unos bombones como muestra de amor, se pueden quemar las calorías de una manera divertida y saludable.

Existen por lo menos 7 razones por las que el sexo es bueno para la salud, pero hay muchas más razones por las que el acto reproductor resulta agradable.

Entre las razones saludables existen estudios científicos en los que aseguran que si un hombre practica dos o más veces a la semana el sexo, se reducen a la mitad las posibilidades de que sufra un ataque al corazón.

Las siete razones saludables son las siguientes.

Es bueno para el corazón. El sexo es un cardio-ejercicio que ayuda a mantener en forma el corazón. En el caso de los hombres, practicarlo unas dos veces por semana ayuda a reducir a la mitad el riesgo de sufrir un infarto.

Ayuda a perder peso. Como cualquier ejercicio, el sexo ayuda a perder calorías. Tener sexo durante 30 minutos quema en torno a las 100 calorías.

Refuerza el sistema inmunitario. Aunque si no se practica sexo seguro se pueden contraer muchas enfermedades, el sexo seguro puede ayudarnos en nuestro sistema inmunológico. Aquellos que tienen sexo una o dos veces por semana, está demostrado que tienen mayores niveles de inmunoglobulina, un anticuerpo que ayuda a protegerse de enfermedades como el resfriado o la gripe.

Reduce el riesgo de padecer cáncer de próstata. En hombres jóvenes, el sexo reduce el riesgo de padecer dicha enfermedad. Un estudio realizado a jóvenes veinteañeros, demostraron que aquellos que tenían cinco o más eyaculaciones por semana, tienes 3 veces menos riesgo de padecer dicho cáncer en su vida.

Alivia el estrés. El tener sexo provoca endorfinas en el cerebro, antes y después del acto, y esos neurotransmisores crean un sentimiento de euforia que relaja sobre los efectos negativos del estrés.

Alivia el dolor. Las endorfinas y la reducción de la presión arterial alivian el dolor. El sexo alivia dolores artríticos, menstruales e incluso las migrañas.

Ayuda a dormir. Además de aliviar el estrés y el dolor, la oxitocina generada durante el sexo ayuda a dormir mejor. El sexo relaja, ayudando a tener un sueño más profundo y reparador.