Cascos considera que el PSOE y el PP están «nerviosos con el cambio» en Asturias
El candidato a la Presidencia del Principado por Foro Asturias, Francisco Álvarez-Cascos, señaló ayer que los dirigentes del PSOE y del PP en Asturias «están nerviosos, muy nerviosos, hasta la desesperación con el cambio» que va a suponer la victoria que pronostica para Foro Asturias en las urnas el domingo.
En el acto, que se celebró en el pabellón de Ceares en Gijón con varios miles de asistentes, el candidato de Foro Asturias señaló que «más allá del tiempo del fracaso y de la corrupción bipartidista está el futuro. Y para ello vamos a levantar las alfombras de algunos despachos, de muchos chanchullos, de todas las corruptelas. Ya está bien, ya basta de que Asturias sólo sea noticia nacional por el paro y por los chiringuitos en que unos pocos desvergonzados juegan a la ruleta con el dinero de todos los asturianos».
En varios momentos de su discurso aludió a la corrupción en el Principado, como cuando señaló que los dirigentes del PP y del PSOE han pactado repartirse Asturias como si fuese «una finca particular para negocios particulares, porque ahora ya sabemos que todos ellos, en Oviedo y en Gijón, son clientes de las mismas empresas hasta para comprar sillas, ordenadores y bolígrafos», señaló en referencia a la «operación Marea».
En un largo discurso en el que fue repasando las propuestas de su programa electoral en materia de creación de empleo, infraestructuras y Universidad, entre otros, también la actitud de «los dirigentes socialistas y populares, confabulados» en el objetivo de «obstaculizar la pretensión de Foro Asturias de regenerar la vida pública, de levantar las alfombras, de promover una generación de políticos que tengan oficio y beneficio, como Carmen Moriyón o Arturo González de Mesa», frente a la actual clase dirigente asturiana que «se ha parapetado en la calumnia, en la maledicencia y en las trampas».