Penúltimo mitin de Mariano Rajoy en esta campaña electoral. El líder del PP ha arropado a María Dolores de Cospedal en Ciudad Real, circunscripción clave para intentar desbancar al PSOE de esta comunidad, que gobierna desde hace 30 años.

Rajoy, salvo los temas de índole castellano-manchegos, ha repetido el prácticamente el discurso que ofreció en la tarde de ayer en Sevilla. Ha enfatizado que “pide el voto para cambiar las cosas”, para que en España se cree empleo. Un voto que el PP administrará, según su líder, con moderación, sensatez, concordia el sentido común”.

Los 1.500 militantes que llenaron el pabellón Príncipe Felipe de Ciudad Real comenzaron a corear “Bareera dice adiós”, en alusión a que Maria Dolores de Cospedal pueda ganar en las urnas el domingo a José María Barreda, actual presidente de Castilla-La Mancha.

Rajoy ha respondido a este entusiasmos aclarando que hay “posibilidades reales” de lograr ese éxito que marcará, sin duda, la orientación de los grandes titulares en la noche electoral. Si la secretaria general del PP gana en su tierra, los populares magnificarán su victoria. Un resultado adverso, sin embargo, podría dar aire al PSOE.

Trampolín hacia la Moncloa

Lo que sí ha dejado claro Rajoy es que aún hay partido, porque los márgenes entre éxito y fracaso son “estrechos”. El trampolín para la Moncloa pasa por cambiar la historia en la tierra de Don Quijote. En este contexto, ha puesto el acento en que “no está escrito en ningún sitio que un partido tenga que gobernar siempre”. Y en una evocación que suena a receta para los concentrados en la plaza de la Puerta del Sol, ha dicho: “eso es la esencia de la democracia, el partido que no cumple, el que lo ha hecho mal, se le quita”.

En esta recta final ya se ha desprendido de algunas de las coletillas que más ha repetido en campaña, aunque como ya indicó en Sevilla, estaba en Ciudad Real porque le dejan y porque le invitan. “Por fortuna yo no soy ese otro señor (por José Luis Rodríguez Zapatero) al que esconde su partido político”.

Mariano Rajoy repetirá esta tarde en esta región, concretamente en Guadalajara. El PP, para evitar que algún colectivo agrupados bajo el paraguas del Movimiento 15-M pudiera “reventar” el acto, ha cambiado la ubicación del mitin que, finalmente, será en un teatro y no al aire libre como estaba previsto. Finalmente, a las nueve de la noche protagonizará el gran acto final de campaña ante más de 15.000 personas en Madrid, junto a Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón.