La familia del fallecido asegura que Ortega Cano conducía borracho
Sedado y con analgesia, José Ortega Cano permanece estable dentro de la gravedad de su estado. Dos días después del accidente de tráfico por el que fue ingresado en el Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla, el ganadero y ex matador “se debate entre la vida y la muerte”, ya que no pueden llevarle al quirófano para operarle de nuevo porque está “muy delicado”, según ha explicado su hermana Carmen Ortega. Sin embargo, esta tragedia tiene un nombre propio más: Carlos Parra Castillo, el hombre que falleció al colisionar el vehículo de Ortega Cano con el suyo. Su cuñado, Bienvenido, afirma saber que el maestro conducía bebido, por lo que espera que no se oculte información sobre las circunstancias del siniestro por ser quien es la otra persona. Asegura que están dispuestos a recoger firmas, si es necesario, para que se haga justicia.
Después de que este domingo fuera intervenido quirúrgicamente en dos ocasiones por un equipo de cirujanos generales, cardiovasculares y traumatólogos, José Ortega Cano permanece luchando por vivir. Su estado es estable dentro de la gravedad y está conectado a ventilación mecánica en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), según ha comunicado el parte médico del hospital sevillano.
Las próximas 48 horas serán decisivas para el ex torero, ya que aunque está sedado y permanece estable dentro de su estado salud “muy grave”, el momento sigue siendo “crítico” y no está “fuera de peligro”, según ha declarado el cuñado del diestro en una llamada al Programa de Ana Rosa. Aunque ha pasado buena noche, quien fuera el último amor de la más grande, Rocío Jurado, ha tenido fiebre con lo que su situación se ha complicado aún más.
Desde que el pasado sábado ingresase en el hospital a causa del accidente de tráfico, la familia de Ortega Cano y la de su mujer Rocío Jurado están arropando al ex torero. Su hermana, Carmen Ortega Cano, ha hablado con una periodista de Telecinco para confesar que “se debate entre la vida y la muerte, ya que no pueden bajarle al quirófano para operarle de nuevo porque está “muy delicado”.
Mientras el diestro hace frente a la peor cornada de su vida, la familia de Carlos Parra Castillo ha incinerado al fallecido en el crematorio de la localidad de La Algaba, cercana a Castilblanco y la familia Ortega Cano ha mandado un telegrama expresando sus condolencias. Y aunque puedan agradecerlas, la familia de la víctima lo que pide es justicia. Bienvenido, el cuñado del fallecido, espera que no oculte información sobre las circunstancias en las que se produjo el accidente por se quien es la otra persona.
Si es necesario, asegura que están dispuestos a recoger firmas para que se haga justicia y se sepa toda la verdad sobre el siniestro. Este familiar afirma saber este familiar, por fuentes cercanas, que el maestro conducía bebido y con exceso de velocidad porque José Ortega Cano había estado bebiendo en algunos bares del pueblo.
Rocío Carrasco llegó algo nerviosa a Sevilla, sin conocer aún los detalles del accidente, según explicaba en la estación de Santa Justa nada más poner un pie en la ciudad hispalense.
El exceso de velocidad de Ortega Cano, posible causa del accidente
La Guardia Civil está ultimando el atestado policial del accidente de tráfico que sufrió el pasado sábado por la noche el torero Ortega Cano, cuyo vehículo chocó frontalmente contra otro presuntamente, y según las primeras investigaciones, por una velocidad inadecuada.
Así lo han señalado fuentes de la investigación del siniestro, en el que trabaja la Guardia Civil desde el primer momento en el que se desplazó al lugar de los hechos, la carretera A-8002 a la altura de Castilblanco de los Arroyos (Sevilla).
Según una primera evaluación de los agentes que recogieron los datos generales del siniestro en el denominado formulario arena, la causa del accidente fue una velocidad inadecuada.
Este es el motivo, según esas primeras pesquisas, por las que el coche del diestro, un Mercedes todoterreno, invadió el carril contrario y colisionó de frente con otro vehículo, un Seat Altea, cuyo conductor murió en el acto. Ambos conductores llevaban el cinturón de seguridad.
El impacto fue tan violento que sacó de cuajo el motor de este segundo coche, con el que chocó un tercer vehículo, una furgoneta Citroen C-15.
Los investigadores están intentado profundizar en las causas del siniestro a partir de las diligencias fotográficas y la inspección ocular realizada en el lugar del siniestro.
QUE PODES ESPERAR COMO PUSE OJALA QUE TENGA UN SUFRIMIENTO LARGO..