Los ‘indignados’ de Valencia piden la dimisión de la delegada del Gobierno
Los “indignados” de Valencia han pedido hoy la dimisión de la delegada del Gobierno, Ana Botella, por haber “criminalizado” el movimiento 15 M “para eludir su responsabilidad por la brutal carga policial” de ayer, tras el acto de constitución de Les Corts Valenciana.
En una rueda de prensa celebrada hoy en la plaza del Ayuntamiento, durante la reelección de Rita Barberá como alcaldesa de Valencia , Adoración Guamar, como portavoz de la comisión jurídica del 15 M, ha asegurado que “es radicalmente falso” que entre los detenidos ayer figuren tres personas con antecedentes penales o que estén imputados.
“La delegada del Gobierno -ha afirmado la representante de los “indignados”- ha utilizado datos falsos para eludir su responsabilidad y falta de control por una carga policial brutal y desproporcionada”.
Ha lamentado también que Ana Botella no haya respetado la presunción de inocencia de los detenidos mientras “juega a favor del presidente de la Generalitat (Francisco Camps), que si está imputado”, al igual que otros “111 cargos que actualmente ocupan cargos (en España) pese a estar implicados en casos de corrupción”.
Tras criticar a Ana Botella por “criminalizar a una persona por estar en situación irregular”, Guamar ha subrayado que estar “sin papeles no es un delito y no impide ejercer derechos fundamentales como el de manifestación y el de la libertad de expresión”.
Por todo ello, ha exigido la dimisión de la delegada del Gobierno “por faltar a la verdad” y como responsable política “de la brutal y desproporcionada carga policial”.
Adoración Guamar ha asegurado que existen testigos y vídeos que recogen “la brutalidad de la actuación policial” y que permiten comprobar “lo que realmente pasó”, que pueden ser visionados en la web acampadavalencia.net.
Desde primera hora de la mañana, entre doscientas y trescientas personas han protagonizado una sonora “cacerolada” delante del ayuntamiento, donde tiene instalado el campamento los integrantes del 15 M, con motivo de la constitución del consistorio municipal.
Con todo tipo de instrumentos y material de percusión (bombos, pitos, bocinas, cacerolas, latas, maderas y botes de cristal) los indignados han mostrado su rechazo a la corrupción con pancartas y gritos como “policía protege a delincuentes”, “presidente (Camps) a (la cárcel de) Picassent” o “corrupto el que no bote”.
El único momento de tensión se produjo alrededor de las 11.30 horas, cuando un ciclista con vestimenta informal intentó circular por delante del edificio del ayuntamiento (en un tramo que estaba abierto al tráfico) y la policía se lo impidió.
Un grupo de concentrados se acercó a la zona donde se le había dado el alto al ciclista, mientras las fuerzas de seguridad formaban un cordón de seguridad y se llevaban al ciclista a un furgón próximo para identificarle y a continuación dejarlo en libertad.
Tras reprochar a los agentes que no dejaran pasar al ciclista “por no ir en un mercedes”, un grupo de concentrados se quitaron las camisetas y mostraron la palabra “indignados” dibujada con pintura roja en sus espaldas.