No tengo mejor opinión de los políticos, en general, que la que tienen la mayoría de los españoles, o la que tienen, sobre los políticos españoles, los alemanes que viene a ser lo mismo. Es increíble la capacidad de cinismo que cabe en algunos personajes. En un pueblo asturiano llamado Trevias, segunda población del concejo de Valdés, los responsables de la corporación municipal arreglaron una de las aceras, pintaron de zona azul algunas plazas de aparcamiento y colocaron la inefable maquinita para expender los boletos correspondientes para el aparcamiento.

Hasta ahí, todo normal, según los tiempos que vivimos. El caso es que la máquina no terminaba de entrar en funcionamiento y, un poco sorprendido, pregunté por el motivo. El motivo del retraso fue al parecer la ilegalidad de la situación creada porque aquella calle, que con tanto esmero había sido objeto de reconstrucción con el ensanchamiento de la acera peatonal y la ubicación de algunas plazas de aparcamiento (menos de las que disfrutaba antes de la reforma), no pertenecía al casco urbano de la localidad, sino que era la carretera Nacional 634 a su paso por la citada localidad, por lo que la gestión de la misma corresponde al Ministerio de Fomento y no al entonces alcalde del Ayuntamiento.

No es un caso aislado. Ese mismo ayuntamiento, por la nefasta gestión de la arquitecta municipal de entonces, obligó a algunos empresarios de la construcción al enviar al paro al personal. ¿El motivo? La espera infructuosa de los permisos correspondientes para el comienzo de diversas obras.

Esos y algunos otros desaguisados de idéntico calibre les ha costado el cargo, que no es baladí. El alcalde y algunos concejales, en ayuntamientos de localidades semejantes, cobran, entre salario y dietas, un buen pellizco. Lo que me pregunto es ¿a quien beneficia una actitud tan nefasta para ejercer el cargo público como el demostrado por los que han sido miembros de aquella corporación?

Si esto ha ocurrido en un ayuntamiento que apenas sobrepasa las quince mil almas en todo el concejo, imagínense a otras alturas…

Oír al candidato Rubalcaba en sus intervenciones preelectorales supone un ejercicio pleno. Parece dispuesto a remediar todo lo irremediable que él ha organizado en contra de la lógica desde que está en política, que son muchos años.

Y me sigo preguntando ¿a quien ha beneficiado todos los asuntos turbios que el señor Rubalcaba ha mangoneado a lo largo de estos muchos años? ¿Hay alguien en el PSOE que crea que el ahora candidato sirvió a intereses lícitos para la causa socialista? Si alguien se responde que sí, me creo en el derecho de poder decir que el PSOE no está legitimado para ejercer cargo alguno en nuestra sociedad, y el candidato Rubalcaba de ninguna manera.

Y cierro. En la primera edición del telediario de hoy lunes 12 de septiembre de 2011, la conductora, refiriéndose a la explosión en la planta nuclear francesa, ha dicho que, desde su despacho, el presidente Rodríguez Zapatero está siguiendo minuto a minuto la noticia… ¡ Ufff…! qué peso me quita de encima… sabiendo que ZP está pendiente de esto no hay problema estoy más tranquilo.