Comportamientos vergonzosos
Las pasadas elecciones municipales y autonómicas del 22-M, están poniendo de manifiesto ciertos comportamientos vergonzosos en algunas Diputaciones y Ayuntamientos que mutaron de color político. Concretamente, en la Diputación de Málaga, gobernada los últimos cuatro años por el PSOE e IU, resulta que el anterior equipo de dirigentes socialistas y comunistas, presuntamente, se han apropiado de un número de ordenadores portátiles y unos 800 teléfonos móviles de última generación, propiedad del citado organismo que utilizaban como instrumento de trabajo.
Lo curioso de la historia es que a pesar de los requerimientos del secretario provincial y portavoz de la Diputación del PP, el material no ha sido devuelto como marcan las normas y el más elemental sentido común, motivo por el cual se verán obligados a denunciar los hechos considerándolo como una “apropiación indebida”.
Al margen de lo chusco del casó, no puede entenderse como podían necesitar una cantidad tan elevada de aparatos, la mitad de los cuales, al parecer, estaban en manos de los “cargos de confianza”, lo cual tampoco encaja ya que la cifra de dichos asesores era de 77.
Cuando los ciudadanos nos enteramos de este tipo de supuestas golferías, se entiende perfectamente porque en todas las encuestas, la clase política, figura siempre como el tercer motivo de preocupación de los españoles.
La única forma de terminar o reducir tantos abusos y corruptelas, sería publicar en los medios el nombre de todos los desaprensivos, que como en este caso, hipotéticamente confunden tan descaradamente el sentido de la propiedad. ¡¡Para llorar!!