El hermano del iraní que apuñaló a siete personas lo justifica: “Él también es una víctima porque está enfermo y no vive en la realidad”
Reza Alizadeh, hermano de Bijan Alizadeh, el ciudadano iraní que el lunes mató a cuchilladas a un jubilado en Santutxu (Bilbao) e hirió a otras seis personas, ha pedido perdón a las víctimas de Bijan, aunque sostiene que el joven encarcelado también lo es “porque está enfermo y no vive en la realidad”.
Reza reclama, en una entrevista que hoy publica El Correo, el ingreso del homicida en un centro psiquiático o “que le manden a su país”. “Él no es un chico violento. Tiene esta paranoia y eso le puede pasar a cualquier persona, también al hijo del juez” que decretó ayer su ingreso en la cárcel de Basauri, sostiene.
Bijan Alizabeh, de 31 años, ha sido tratado por la Justicia como un detenido normal; es decir, como alguien que no sufre enfermedad mental alguna. El homicida fue trasladado el pasado martes desde los calabozos a la Unidad de Psiquiatría del hospital de Basurto, donde, tras ser examinado durante horas, recibió el alta, al parecer, sin ningún tratamiento médico, según informaron fuentes cercanas al caso. Ayer fue puesto a disposición judicial a primera hora de la mañana y el titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Bilbao, tras tomarle declaración, ordenó su ingreso en prisión. Pasada la una de la tarde, el arrestado fue trasladado a la cárcel de Basauri, donde permanece ingresado desde entonces.
Por el momento, el acusado no ha sido entrevistado por psiquiatras forenses, una diligencia que podría realizarse más adelante, cuando avance la instrucción. No se descarta que los peritos puedan apreciar en el reo algún tipo de trastorno considerado como una circunstancia atenuante, distinto del eximente completo que se aplicaría a un enfermo mental.
Alizadeh, un joven moreno de 1,75 metros de estatura, que carece de antecedentes policiales aunque ha sido identificado en varias reyertas, se mostró «tranquilo» en la celda, según algunos testigos. Una actitud incomprensible para alguien que ha matado a una persona y ha intentado acabar con otras seis. La masacre se desencadenó alrededor de las nueve y media de la mañana del lunes en las inmediaciones de la boca del metro de Zabalbide, en el populoso barrio de Santutxu. Según algunas versiones, tras una primera discusión con una pareja, el acusado esgrimió un cuchillo de 17 centímetros de hoja que, según los testigos, manejaba con gran destreza, y atacó primero al joven y después a su novia. A continuación hundió el filo del arma blanca de manera indiscriminada a todo el que se encontraba en su camino.
Bijan Alizadeh se ensañó especialmente con una de las víctimas. Podía haber sido cualquiera, pero Kepa Mallea, un profesor jubilado que se encontraba en el bar Errondaberri tomando un café y leyendo el periódico tranquilamente, fue el blanco de sus iras. Indefenso, recibió siete puñaladas en distintas partes del cuerpo que le afectaron a órganos vitales, según ha revelado el resultado de la autopsia practicada al cadáver.
Incidente en Bilbaoarte
La primera le alcanzó en la espalda mientras estaba sentado junto a la barra. Cuando la víctima se volvió para intentar defenderse, le siguió apuñalando; primero en el costado, después en el tórax y, finalmente, la última, en la cara, hasta causarle la muerte, según indicaron fuentes de la investigación. Su viuda y sus hijas, en estado de shock, se mostraron muy afectadas por el asesinato.
El homicida fue detenido por una patrulla de la Policía Municipal de Bilbao un minuto y veinte segundos después de recibir la primera llamada de alerta por parte de los vecinos de Santutxu que presenciaron la cacería. Los agentes evitaron que el agresor fuera linchado por algunos vecinos o que pudiera seguir clavando un cuchillo de grandes dimensiones a diestro y siniestro. Uno de ellos le había golpeado en la cabeza con un gran adoquín formado por cuatro baldosas.
Una vez en la comisaría de la Ertzaintza en Deusto, adonde fue trasladado desde Garellano porque era el cuerpo que se encargaba de la investigación, el detenido se negó a declarar, indicaron fuentes oficiales. Los investigadores tratan ahora de reconstruir los pasos del joven en las últimas horas antes del mortal crimen, que podía haber sido múltiple. Días antes protagonizó un incidente en la sede de Bilbaoarte, que ha sido comunicado a la Ertzaintza, según ha podido saber este periódico.
De los seis heridos que produjo la locura homicida de Bijan, cuatro, todas ellas mujeres, siguen ingresadas en los hospitales de Cruces y Basurto. El joven iraní podría ser acusado de siete delitos de homicidio, seis de ellos en grado de tentativa.
Se estan retratando ellos solos atancando solo a occidentales, estan dejando bien a la vista lo racistas que son, a ver como justifican esto ¿cuantos moros o negros son atacados?, y en este caso ademas la mayoria de victimas son mujeres…que casualidad, que valientes son estos misogenos, o atacan mujeres o van en grupo, o con cuchillos, siempre buscando que la victima no se pueda defender justamente y este en desventaja, cobardes, dais asco.
que ignorantes sois, no conoceis para nada la hisotoria de esta persona ni si tiene transtornos ni nada, solo os dejais llevar por el racismo como si todos los iranies fueran apuñalando a los occidentales, cuando occidente esta ocupando a base de bombas todo medio oriente.
¿no sabeis que occidente se muere de ganas por invadir iran para poder dominar plenamente todo el mundo?
Seguro pero seguro que si eso lo hace en su país nadie hablaría ni le tendría en cuenta la supuesta “locura”, ya estaría a punto de caerle todo el peso de la ley de allí.
a la puta mierda con la puta alianza de falsas civilizaciones, fuera de España todo inmigrante que no se adapte a lo ESPAÑOL, y a el que no le guste en un avión y a Mauritania, pero ya.
Que le manden a su pais junto a toda su asquerosa familia, que esta enfermo dice… vayase usted a la mierda.
¿Por que los supuestos problemas mentales nunca hacen que se acuchillen entre ellos?.
Primero un negro que le da una paliza a una señora por que “era batman” y ahora uno de estos que apuñala a gente. Que raro en este tipo de “patologías” que parece que siempre les mandan “matar” pero nunca suicidarse.
Es llamativo que los acuchillados de estos supuestos “locos” musulmanes siempre acuchillan a cristianos blancos. Igual que el “loco” que acuchilló a varios en un centro médico. Los musulmanes generalmente se relacionan entre musulmanes, viven con ellos, trabajan en tiendas de musulmanes y ninguno de estos “locos” acuchilla a los suyos. Quizá tendrá algo que ver que los musulmanes consideran a los cristianos poco menos que ratas. De ahí, no me extraña que no les cause ningún problema en matar ratas.