Un chino y un marroquí, detenidos en dos operaciones contra el tráfico de drogas
Durante los primeros días del año, la Guardia Civil ya ha intervenido 67 kilogramos de droga en los registros rutinarios que desarrolla durante el embarque de pasajeros y vehículos en los distintos buques que enlazan Melilla con la Península
La Guardia Civil ha conseguido incautar 67 kilogramos de droga, entre hachís y polvo de hachís, durante los primeros días del año. Las intervenciones, tres en total, son resultado del registro que realizan agentes de este cuerpo armado en el embarque de los buques que conectan Melilla con la Península.
Droga oculta en el interior de la rueda de repuesto / Autor: OPCLa primera operación se llevó a cabo en la noche del día 5 de enero, durante el embarque de vehículos en el buque Juan J. Sister, que realiza la ruta Melilla-Málaga. El reconocimiento de un vehículo de alquiler con matrícula nacional finalizó con el hallazgo de 40 paquetes con hachís ocultos en el interior de la rueda de repuesto.
El transporte de la droga, con un peso total de 21,6 kilogramos, supuso la detención inmediata del único ocupante del coche, un chino residente en Madrid de 20 años de edad, como supuesto autor de delitos contra la salud pública.
Las otras dos intervenciones se sucedieron el día 17 de enero. En primer lugar, se detuvo a un hombre de nacionalidad marroquí y domicilio en Murcia por conducir un turismo con 34,5 kilogramos de polen de hachís –repartidos en 99 paquetes- escondidos en un doble fondo.
El registro de un turismo concluyó con la obtención de 34,5 kg. de droga / Autor: OPCLa Guardia Civil cree que Murcia podría ser el destino de la droga incautada durante el registro en el embarque, esta vez, del buque que conecta Melilla con Almería.
Minutos más tarde, los agentes detectaron anomalías en una plataforma, rotulada a nombre de una conocida agencia de transportes de la ciudad, que era remolcada para su embarque en el mismo buque. Tras su inspección, se localizaron 6,6 kilogramos de polen de hachís envueltos y camuflados bajo un cartel adosado a la plataforma.
Aunque en este último caso no se han producido detenciones, la Guardia Civil ha abierto una linea de investigación para determinar la autoría del hecho delictivo.