Pese a que la Guardia Civil evita cada año que cientos de ilegales perezcan ahogados, la ONU le acusa ahora de provocar la muerte de un senegalés que pretendía alcanzar las costas españolas.

Alberto Granados Garmendia.-El Comité contra la Tortura de la ONU ha declarado que España violó la convención internacional en los hechos que concluyeron con la muerte de un inmigrante senegalés y acusa a la Guardia Civil de Ceuta de pinchar el salvavidas cuando intentaba entrar en España. 

Se trata de una noticia falsa y tendenciosa, propagada por el ‘stablishment’ mediático, según la cuál el ahogamiento de un senegalés en las costas de Ceuta en septiembre de 2007 se habría producido porque la Guardia Civil le pinchó el flotador para que éste se ahogara.

En base a dicho ifundio, la ONU exige a España condenar a la Benmérita por dicho suceso.

Nuestros medios de comunicación, dando pábulo a la denuncia del grupo de presión inmigracionista CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado), no han escatimado calificativos para describir lo mala que es la Guardia Civil al pinchar los flotadores de unos pobres e indefensos inmigrantes, para que éstos se ahogaran antes de llegar a las idílicas costas de Ceuta. Estos periodistas abonados a lo políticamente correcto son incapaces de preguntarse por algo tan elemental y que terminaría por arrojar luz al asunto: Si la Guardia Civil quería que los subsaharianos se ahogaran, ¿para qué molestarse entonces en proporcionarles unos flotadores salvavidas?

También señalan estos medios, sirviendo de portavoz a la ONU, de que se trata de una vulneración de la Convención contra la tortura, en cuanto constituyen un “trato cruel, inhumano y degradante”.

Por supuesto se “olvidan” de aportar la versión del propio Instituto Armado y la resolución judicial que ya tuvo lugar en su momento, cuando se investigó el asunto.

El secretario general de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Ceuta, Juan Amado, ya dijo cuando se investigaron los supuestos hechos que “eso no cabe en cabeza humana”, y además recordó que la Guardia Civil ha salvado la vida de decenas de inmigrantes que intentaban acceder ilegalmente a España en ese mismo punto de la frontera marítima con Marruecos. De hecho, la AUGC ya había denunciado ante el Defensor del Pueblo la situación que se vive en la frontera ceutí.

Las mafias de la inmigración que operan en Marruecos alquilan trajes de neopreno a los inmigrantes que tratan de entrar a España a nado y se encargan de recuperar el equipo una vez que han conseguido llegar a Ceuta.

Según la AUGC, incluso se ha dado el caso de que las mafias han ido a recuperar los trajes de los inmigrantes que morían ahogados en el intento.

Los hechos ya fueron investigados por la Fiscalía en 2008 (ver: http://www.augcmadrid.es/noticiaaugcceuta54.html)

Una grabación desmonta las acusaciones contra los guardias civiles

La AUGC desmintió rotundamente la denuncia presentada por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado que motivó el escrito de la Fiscalía General y defendió a los agentes del Instituto Armado, recordando que los “guardias somos personas y no nos dedicamos a pinchar flotadores ni a esposar a inmigrantes, sino que los auxiliamos”.

Por su parte, Asigc aseguró que los agentes saben que buena parte de los inmigrantes no saben nadar y que por tanto no se dedican a pinchar sus salvavidas.

Por otro lado, la Delegación del Gobierno en Ceuta aseguró que la actuación de los tres guardias civiles fue “ajustada a derecho, escrupulosa y humanitaria”.

De hecho se reabrió una nueva investigación sobre el caso. El jefe del Gabinete Técnico de la Delegación del Gobierno, Clemente Cerdeira, dijo que la apertura de una nueva investigación por el fiscal general del Estado fué “buena para todo el mundo”, al entender que “aclarará las posibles dudas que puedan existir”.

Actuación correcta

Cerdeira recordó que este asunto “ya fue investigado en su día por la Fiscalía de Ceuta, que ordenó el sobreseimiento de las actuaciones al comprobar que los agentes actuaron de manera correcta”. Añadió que el principal aval “es la grabación de las imágenes por la videocámara que controla el perímetro fronterizo, donde se ve claramente que no hubo nada ilegal”.

El jefe del Gabinete Técnico agregó que la actuación de los guardias civiles se produjo a requerimiento de las Fuerzas de Seguridad de Marruecos y que los inmigrantes “fueron dejados cuando el agua les llegaba por la rodilla y no a cien metros de la costa, como se dice”.

El representante gubernamental lamentó que se produjera la muerte del inmigrante “que incluso fue atendido por una ambulancia española y pedimos permiso para entrar en Marruecos para llevar a cabo esta labor de auxilio”.

Asimismo, fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta aseguraron que esta investigación se afrontó con “absoluta tranquilidad”, porque se actuó perfectamente.

La ONU

Sobran las palabras con esta entidad manipuladora e internacionalista que mas bien pareciera realizar campañas de propaganda inmigracionista para convertir toda Europa en un apéndice mas de África