En Andalucía CC OO y UGT han entrado claramente en campaña. El pasado día 9 no dudaron en coaccionar a ex empleados de Delphi, para que acudieran al acto de campaña en el que iba a participar Alfredo Pérez Rubalcaba, el día siguiente en la localidad gaditana de Chiclana.

Un grupo de 500 antiguos trabajadores de la factoría de Puerto Real, que tras el cierre de la empresa están cobrando un salario por asistir a cursos de formación y reciclaje, fueron llamados a una reunión que supuestamente sería informativa y en la que se les iba a comunicar las posibilidades de renovación de sus pagos una vez termine el actual convenio en septiembre próximo.

En lugar de esta información, los centenares de asistentes a la reunión fueron informados de que “si gana el PP se os acaba cobrar un duro”, como declaró a Intereconomía uno de los asistentes al acto. Además, se les comunicó que quien no se desplazara a Chiclana para participar en el mitin, “perderá la posibilidad de renovación en septiembre” aunque en las elecciones “gane Griñán”, ha manifestado a este diario la misma persona.

Cierre de astilleros

El grupo de personas que fueron reunidas el día anterior al mitin de Chiclana forman parte de los trabajadores de las factorías Delphi de Puerto Real. Un complejo industrial que fue cerrado en 2007 dejando en la calle a 2.000 personas. Los procedimientos para que la empresa se quedase sin trabajadores fueron muy variados. Los mayores de 50 años fueron prejubilados, el resto pudo optar entre formar parte de un ERE, recibir ayudas para inscribirse en planes de autoempleo o realizar cursos de reciclaje para reincorporarse al tejido industrial que se iba a crear, fomentado desde la Junta de Andalucía, en las instalaciones de Puerto Real.

El resultado de todas estas gestiones que debía realizar la Junta es que no se ha generado puesto de trabajo alguno porque el Plan Bahía, con el que se iba a reindustializar la zona empresarial, no ha dado ningún resultado. Es más, en la actualidad se encuentra inmerso en un proceso judicial por fraude tras haber costado más de 24,5 millones de euros al Gobierno andaluz.

Becados

Los trabajadores a los que los sindicatos coaccionaron para que acudiesen a llenar el acto en el que participaban el secretario general de los socialistas, Rubalcaba, y el candidato a la Junta, José Antonio Griñán, en Chiclana forman parte de un grupo de 600 trabajadores que están a la espera de clarificar su situación laboral. La Junta ha manifestado que “se ha realizado un esfuerzo más que considerable con el colectivo de trabajadores de Delphi […] de los que quedan 600 por recolocar”. En cualquier caso, siempre se han justificado señalando que “han estado cobrando una beca de 1.600 euros mensuales mientras asistían a cursos de formación, un coste económico que la Junta de Andalucía no puede seguir asumiendo”.