Comenzó el partido en el Santiago Bernabéu con un Madrid dispuesto a llevarse los tres puntos por la vía rápida y evitar de esta forma un posible susto en los últimos minutos como ya pasara ante Málaga y Villarreal. Para ello, Mourinho, que vio el encuentro en la grada tras su expulsión, daba galones a Kaká, que recogía el testigo del también sancionado Ozil, y dejaba en manos del tridente Cristiano, Benzema e Higuaín el oficio del gol.

Sin tiempo para masticar el encuentro, el delantero francés, escorado ante la Real en banda derecha, encontraba a Higuaín que, llegando desde segunda línea, ponía el primero en el marcador gracias un remate de primeras que sorprendió a Bravo.

Lejos de relajarse, el equipo blanco puso la directa con un Cristiano Ronaldo muy enchufado que perdonó dos, pero que a la tercera ampliaba la ventaja gracias a un pase al hueco de Kaka, que rompía la defensa adelantada de una Real Sociedad a merced del equipo blanco.

Con el 2-0, Benzema se sumó a la fiesta y, con el pecho, embolsó un regalo en forma de pelota de Xabi Alonso para hacer una vaselina que supuso el tercero de los madridistas. Sin embargo, antes del descanso y en el único acercamiento de los de Montanier, Xabi Prieto recortaba distancia con un disparo desde fuera del área que, tras pegar en Sergio Ramos, se colaba por la escuadra izquierda de Casillas.

Ya en la segunda mitad, se reanudó el partido como comenzó y, tras un primer remate de Cristiano que no vio puerta, Benzema recogía un buen pase de Khedira para fusilar al portero vasco y establecer el 4-1 en el marcador.

Mientras, la Real Sociedad veía como, metido atrás, la goleada no fue evitable e intento irse al ataque. Sin embargo, en uno de los pocos acercamientos de los vascos, el Madrid hacía el quinto y definitivo en una contra de manual del Madrid que comenzó Varane, que vio el desmarque de Higuaín, quien puso el balón en paralelo para que Cristiano remara a placer.

De esta forma, y con los goles del ‘tridente’ madridista, se esfumó una segunda parte que de poco sirvió para ambos conjuntos, y en donde fue el Madrid el que siempre estuvo más cerca del gol.

Con la afición del Bernabéu feliz, Mourinho dio minutos a Sahin, Coentrao y Jesé para cerrar un partido que nunca vio en peligro y, de esta forma, dar por cerrada una semana que comenzó nervioso el equipo madridista, pero que termina tranquila con el Apoel como próximo objetivo.

Mallorca, 0 – Barcelona, 2

En un partido donde los primeros instantes fueron para los locales, ‘el Chori’ Castro sembró dudas en la zaga azulgrana. Un córner botado por el uruguayo, que fue rechazado para el propio extremo y un mano a mano con Víctor Valdés, acabaron por animar a un Mallorca que incomodaba a un desdibujado Barça.

No obstante, con el paso de los minutos, el Barcelona empezó a hacerse con el control de la pelota pero la presión bermellona les obligaba a armarse de paciencia ante la imposibilidad de romper el muro de los de Caparrós.

Pese a ello, la primera gran ocasión del partido llegó gracias a un fallo defensivo. Una pelota peleada por Iniesta creó incertidumbre en la zaga bermellona que entregó la pelota a Messi en la frontal, lo que permitió al argentino encarar a Aouate, pero el disparo impactó en la cara del portero.

La réplica del Mallorca estuvo en la cabeza de Álvaro. Un gran pase de Pereira fue rematado por el delantero que a punto estuvo de sorprender a Valdés, pero finalmente el cabezazo se marchó rozando la escuadra derecha del guardameta.

En un partido tosco y lento, el Barça lo intentaba pero no encontraba esa fluidez y profundidad que le permitiera crear ocasiones claras. Así, en una jugada a balón parado, el conjunto de Guardiola metió el primero de la tarde. Una falta escorada botada por Messi, se paseó por el interior del área sin que defensas y atacantes lograran atinar a tocarla (0-1).

Ya en la segunda mitad, fue el Mallorca el que de nuevo salió con más intención. Por su parte, el Barça prefería jugar con la calma de tener el marcador a favor y no se acercaba con demasiada velocidad a las inmediaciones de Aouate.

Una pelota luchada por Thiago, golpeó en el pecho del internacional español, pero el colegiado interpretó que se la había llevado con la mano, provocando la expulsión del centrocampista por segunda amarilla.

Con unos menos, el equipo de Guardiola dispuso de una nueva ocasión para aumentar la diferencia. Una buena jugada de Alexis terminó con un remate de Messi casi a puerta vacía, pero el argentino marró el disparo. Aprovechando la superioridad numérica, los locales empezaron a acercarse con más criterio a la portería de Valdés pero no encontraban el hueco necesario para batir al portero internacional.

Así, con más ímpetu que juego lo intentaba el cuadro balear, pero fue el Barça el que golpeó de nuevo. Una buena jugada colectiva terminó con un remate de Messi al palo izquierdo de Aouate, que rebotó hacia el centro del área y le cayó a los pies de Piqué que solo tuvo que empujarla (0-2). 

Getafe , 3 – Valencia, 1

El Valencia dio un paso atrás en su objetivo de conseguir la tercera plaza de la Liga BBVA y cayó (3-1) en el Coliseum Alfonso Pérez ante un Getafe superior, que fue de menos a más y que remontó el tanto inicial de Soldado.

Los de Unai Emery, que salieron ‘enchufados’, se adelantaron pronto gracias a un potente disparo de Soldado. El ariete valenciano, que no celebró el tanto por su pasado getafense, fusiló a Moyá tras una buena jugada de los ‘ches’. Sin embargo, este gol sirvió de acicate para los azulones, que adelantaron sus líneas y desperton muy pronto. Y así fue porque apenas siete minutos después Pedro Ríos igualó la contienda con un certero remate de cabeza tras una gran jugada de Diego Castro. El mejor de los argumentos para el ‘Geta’ que comenzó a creer en darle la vuelta al marcador, algo que llegaría mediado el primer acto.

En esta ocasión le tocó a Miku enarbolar el orgullo azulón. El venezolano, tras un disparo mordido de Gavilán, metió la testa para poner el 2-1. Pero aún habría más castigo para los valencianistas, que recibieron el tercero antes de enfilar el túnel de vestuarios, a 15 minutos del descanso. Bruno, en propia meta, estableció el definitivo 3-1 tras una falta en contra. Un gol que evidenció que el Valencia no está en su mejor momento y que este domingo podría ceder el tercer puesto en manos del Levante, la revelación del curso.

En el bando contrario, los de Luis García ya ‘aseguran’ la permanencia –tienen más de 15 puntos de ventaja– y pueden pensar en jugar nuevamente en Europa. Un éxito para los del Sur de Madrid, que la pasada temporada apuraron hasta la última jornada para sentenciar la salvación.