El Madrid se impone al Ajax (1-4) con un nuevo ‘hat trick’ de Cristiano Ronaldo
Salvo el lunar de ese gol encajado a balón parado y unos minutos de tonteo que pudieron costarle el empate provisional, el Madrid completó en el Ámsterdam Arena su mejor partido desde la Supercopa. Llega con grandes sensaciones al clásico del domingo en el Camp Nou. Fue un compendio brillante de calidad, toque, intensidad, velocidad y pegada.
Cristiano firmó su segundo ‘hat trick’ consecutivo, Benzema ejecutó una chilena extraordinaria en el segundo tanto y, sobre todo, Kaká se acercó a su mejor versión. Resta saber si gozará de continuidad.
Mourinho estudió minuciosamente al Ajax, un histórico que trata de mantener ese estilo atrevido que le encumbró en tiempos de Johan Cruyff pero que desde hace décadas carece de los jugadores necesarios para ejecutarlo. Es un equipo blandito, ramplón, vulnerable. Hay que agradecerle, por el bien del espectáculo, que deje jugar, no de patadas y se abra. Por algo el Madrid le ha endosado nada menos que 16 goles en los cinco partidos en los que se han medido en los últimos tiempos.
El técnico luso evitó castigar a Sergio Ramos con la suplencia o el lateral derecho, pero revolucionó el once. Alineó un equipo de garantías y, de paso, aunque lo negó en la previa, no perdió de vista el clásico del domingo en el Cam Nou. Más por el descanso a Di María y Khedira, y la titularidad de Callejón y Essien, que por las suplencias de Modric y Özil, dos futbolistas en entredicho. ‘Mou’ no está conforme con ninguno de ellos. Al alemán lo tiene atravesado porque entiende que no cumple como buen profesional en entrenamientos y partidos. Le reclama más compromiso, ya que su clase es indudable. Y sobre el croata ya dijo que dista mucho de ser ese futbolista de jerarquía que, supuestamente, el Madrid fichó.
Alineó a Kaká de titular y acertó de pleno. Lanzó un serio aviso a los otros dos enganches de la plantilla, puso al brasileño en el gran escaparate internacional e hizo un guiño a Florentino Pérez. Sobre todo ante equipos de la traza de los ‘ajaccied’, con espacios por delante, Kaká exhibe grandeza. Mientras le aguantó el físico, fue el mejor jugador sobre el césped. No cesó de desmarcarse, buscó el balón, ofreció magníficos pases, arrastró a los defensas, trazó diagonales, percutió y desequilibró.
Kaká ejerció incluso de Xabi Alonso y se prodigó en los lanzamientos de esquina. Dejó solo a Cristiano ante el portero en un movimiento de ‘crack’ y merodeó el gol en varias acciones. En el arranque de la segunda mitad, asistió con precisión de cirujano a Benzema, quien luego se marcó un remate antológico para acercar la victoria. Incluso a un 70%, el que fuera ‘Balón de Oro’ es más jugador que Modric y que Özil de aquí a Lima.
Gobierno absoluto
El Madrid disfrutó de un gobierno del partido con mayoría absoluta, salvo un cuarto de hora de ‘caraja’ que hizo temer incluso por el resultado hasta que Cristiano puso las cosas en su sitio. Fue un equipo más completo que ante el Manchester City en el Bernabéu, donde cosechó un triunfo más de épica, orgullo y arrojo que de fútbol.
Gozaron los ‘verdes’ de numerosas ocasiones para encarrilar el triunfo mucho antes de que Cristiano abriera la cuenta. Ocurrió que, una y otra vez, los disparos eran desviados por Vermeer, un guardameta más de balonmano que de fútbol. Lrechaza casi todo y atrapa más bien poco. El gol vino de una excelente internada de Benzema y un buen pase que se le quedó franco al portugués tras un rechace.
Salió el Madrid igual de decidido tras el descanso. Presionó arriba, robó y, a la mínima oportunidad y se desplegó al contragolpe con una velocidad de vértigo. El 0-2 fue una obra de arte compuesta por dos artistas:un trazo mágico de Kaká y plástica acrobacia de Benzema. Los de Mourinho lo vieron todo tan sencillo que pensaron en el Barça. Agravaron una enfermedad crónica y encajaron otro gol de córner. Ni defensas, ni Casillas, sin autoridad en el área pequeña. Ese gol espoleó a la grada y a unos tulipanes, que crecieron y pudieron empatar. Menos mal que Hoesen no acertó a portería vacía y dejó patente por qué es suplente. Cristiano, primero tras un tuya-mía estelar con Benzema y luego con un toque sutil, devolvió las aguas a su cauce. Y luego besó el balón.
La noticia deberia decir EL MADRID POR FIN ALINEA A KAKA