Causas de la tragedia siria
Este es el segundo año que continúa en Siria una amarga guerra civil. Las fuerzas gubernamentales no se detienen ante la utilización de aviones, artillería y vehículos blindados. Los rebeldes a su vez, realizan ataques en gran escala, luchando en zonas densamente pobladas y en las calles. Como resultado, a estas alturas más de 30 mil sirios ha muerto, cientos de miles aparecen heridos, más de un millón de personas han huido a los países limítrofes.
Ciudades y pueblos se encuentran en ruinas, se han destruido infraestructuras y comunicaciones, la población está al borde de una catástrofe humanitaria. Ante tales hechos vale la pena preguntarse. ¿Cuáles son las causas de esta tragedia? ¿Quién y por qué se pelea allí? Parecería que la respuesta es obvia: Por un lado, están los partidarios del régimen encabezado por Bashar Al-Assad, mientras que en la otra acera, aparecen los distintos grupos armados de la oposición, apoyados desde el exterior.
Como quiera que las fuerzas están casi parejas, ello trae como consecuencia, que ninguna de las partes admita ceder. Peor aún, ni se disponen de condiciones previas mínimas, que garanticen que estas negocien. Externamente el persuasivo gobierno sirio, se enconcha en sí mismo y pareciera estar en el umbral de la bancarrota.
El régimen que por mucho tiempo ha gobernado el país, operó en beneficio de una minoría religiosa, la alauita (cerca del 10% de la población del país), la cual ha usurpado por la fuerza el poder en Siria. Está claro que en sus primeras etapas (periodo postcolonial), los lemas del panarabismo y de la dictadura del gobernante partido Baath, lograron cohesionar la nación siria, facilitando la construcción de un gobierno independiente y sentando las bases de la economía nacional; pero no es menos cierto que en actualidad, el gobierno se ha convertido en una rémora para el desarrollo del país. La mayoría de la población siria, es de origen árabe-sunita. Estos han sido excluidos del poder durante muchos años, negándoseles la posibilidad de disfrutar de sus derechos humanos y de desarrollar a plena capacidad su potencial en los negocios y otras aéreas.
En Siria, tres millones de kurdos, son considerados ciudadanos de segunda clase, siendo forzosamente reasentados, y aproximadamente 300 mil de ellos no cuentan siquiera con ciudadanía. El régimen actuaba como una copia al carbón, pero en forma más moderada del régimen baathista de Saddam Hussein, que gobernó en Bagdad. Definitivamente que se trata de una situación muy trágica en la que de hecho, Bashar Assad, se he convertido en su rehén. El mismo, oftalmólogo de profesión, fue accidentalmente encumbrado a los 34 años, como Presidente del país.
El nuevo jefe de gobierno, heredó un Estado con una economía atrasada, una administración corrupta, con la mayoría de la población viviendo en la pobreza, una nación sin norte definido y con un sistema político volátil. A pesar de gobernar por más de 10 años, Al-Assad fue incapaz de implementar las reformas políticas y socio-económicas más urgentes.
Frente a ello, el pueblo sirio se armó de valor y exigió el levantamiento de la inmutable ley marcial, la separación de poderes, la implantación de un sistema multipartidista, el establecimiento de instituciones democráticas, mayor beligerancia para la sociedad civil y la igualdad de todos los grupos por motivos étnicos y religiosos.
En la medida que el incremento demográfico se aceleraba y el número de jóvenes educados aumentaba, también se hacían evidentes la virulencia de las protestas. Sumado a ello, la “primavera árabe” de 2011, generó en la sociedad siria la esperanza de un cambio rápido, empujando el pueblo a las calles.
En contrapartida, la brutal represión contra los manifestantes, transformada en verdaderas matanzas y el uso de armas pesadas por las tropas del gobierno; provocaron que el soterrado conflicto escalara a peligrosos niveles. A los factores de desestabilización interna, se agregaron, lo de orden externo. La situación empeoró y se hizo innegable en el gobierno de Bashar Al Assad y en el vecino Líbano; una marcada influencia iraní. Siria se convirtió en un trampolín para las aventuras de Teherán en la región.
A través del territorio sirio se transportan los pertrecho militares necesarios para abastecer al grupo islamista libanés Hezbolá y parte de ellos, llega también al grupo Hamas. Tal situación, puso en evidencia el riesgo real en la región de la proliferación del Islam chiita militante, de allí la furibunda oposición, contra Damasco, por parte de la familia real de la casa de Saud y del Emir de Qatar, los cuales son apoyados por la mayoría de los países árabes, dominados por el Islam sunita, del clan Hariri del Líbano y de Turquía.
Cabe señalar que Ankara durante mucho tiempo había participado directamente en agitar la guerra civil en Siria, lo que sin duda constituye una injerencia en sus asuntos internos y una violación de la soberanía de un país independiente. Hoy en día, el conflicto armado está en plena ebullición, en medio del fuego de artillería y de mortero desde ambos lados; a lo que hay que agregar, la autorización del Parlamento turco para efectuar operaciones militares transfronterizas.
Está claro que las explosiones en la zona fronteriza son, ante todo, promovidas por las fuerzas rebeldes de la oposición siria, a las cuales les conviene más, el desenlace de un conflicto entre las fuerzas de Bashar Al Assad y Turquía. Prueba de ello, es la actitud conciliadora del gobierno de Damasco, el cual reiteradamente conmina a Ankara a cooperar en la protección contra los rebeldes ubicados en la frontera común, los cuales ponen en peligro, la seguridad regional. Los Estados Unidos y los países de la Unión Europea han desempeñado un papel determinante en la asistencia a los exiliados sirios y la implementación un régimen restrictivo de sanciones, presión político- diplomática, económica y financiera, de información y propaganda, contra Damasco.
En Estambul, París, Washington, Doha, Riyadh, Beirut y varias otras capitales se producen negociaciones con los representantes de la oposición siria; con el fin de moldear un futuro gobierno pro-occidental, tal y como sucedió en Irak y Afganistán. Tal oposición Siria ha recibido ilimitados recursos financieros, materiales y asistencia militar de Estados vecinos.
En las filas de los adversarios del régimen están luchando inclusive, grupos islamistas extremistas de la hermandad musulmana como Tawhid que son parte de las fuerzas de la columna vertebral del Ejército sirio libre, al igual que el grupo Ansar al-Islam y muchos otros, incluidas células de Al-Qaeda y los talibanes. Es evidente que los que digitan la revolución siria, no desdeñan nada en su empeño por derrocar lo antes posible a Bashar Assad. Los primeros, esperan liberarse poco a poco de la mayoría de estos grupos y llevar al poder en Damasco, aquellos fuerzas aupadas por ellos.
Si consideramos los acontecimientos acaecidos en otros países árabes, los hechos nos indican que Siria no será la excepción del ascenso al poder de sectores tales como los Hermanos Musulmanes, los salafistas y otros grupos islámicos. Ello se constata tras la cumbre de la oposición siria en Doha, donde la recién creada Coalición Nacional Siria, incluyó entre su dirigencia a 7 miembros de la Hermandad, lo que hace a esta agrupación, la de mayor representación individual. A pesar de que el tiempo no necesariamente trabaja para la oposición y la derrota del régimen a través de una guerra de guerrillas a gran escala, aun no se vislumbra, detrás de la puerta; lo cierto es que una parte considerable de la población no apoya a Assad.
Si a ello se le suma, como factor determinante para el triunfo, el amplio apoyo, que la oposición recibe del extranjero; no es difícil predecir el futuro de Assad, quien aislado internacionalmente, sólo cuenta con el apoyo de un país que como Irán, no tiene frontera común con Siria. Con respecto a la posible participación de Bashar Al Assad o sus partidarios en el futuro político de Siria, las previsiones son aun más pesimistas.
Después de la sangrienta y prolongada guerra y el uso de armas pesadas contra su pueblo, el régimen de Al Assad está condenado. El círculo que lo rodea, se aferrará a él, en razón de que no tienen a dónde huir y que su presencia les da una apariencia de legitimidad. La cúpula baasista y alauita y las fuerzas que los sostienen, perderán no sólo el poder, sus posesiones y el dinero; sino que verán amenazadas sus propias vidas. El destino que les espera, será el mismo que el de los baasistas iraquíes y el del clan Al-Tikriti de Saddan Hussein, que fueron arrojados al basurero de la historia y sus figuras más odiosas, ejecutadas y otros condenados a largas penas de prisión.
Lamentablemente, la comunidad mundial organizada en instituciones internacionales de tan probada autoridad como la ONU, la Liga Árabe y otras, no fueron capaces de detener esta carnicería fratricida masiva. En la cuestión siria también se hicieron presente, muchas diferencias de principio, sobre las valoraciones respecto al régimen de Al Assad en Washington, Bruselas, París, Londres, Moscú y Beijing. El legado de la guerra fría y la desconfianza entre las grandes potencias, terminó dificultando la búsqueda de medios eficaces para prevenir y detener este tipo de conflictos.
*Profesor Titular de Relaciones Internacionales de la Universidad de Panamá.
Hay otras versiones de este asunto, como otras opiniones del tema de Mali (y Argelia). Yo creo que esto no busca más que los intereses de USrael y del sionismo genocida (que ni una palabra en el artículo acerca del mismo) y allanar el camino para destruir a Irán (en 20 años o menos guerra seguro) y “quedarse” (por no decir expoliar) recursos energéticos en manos de los usureros amos del mundo. Las “primaveras árabes” no son tan democráticas ni bonitas como creía el Sr. Pont, el masón español, que las secundaba, hacia lado y apoyaba. No cuadra mucho la… Leer más »
Más votos en contra tengo más razón acumulo.
Un texto impecable de Aymeric Chauprade sobre las causas del conflicto sirio.
http://www.realpolitik.tv/2012/11/aymeric-chauprade-ou-vont-la-syrie-et-le-moyen-orient/
Artículo carente de rigor y objetividad, lleno de datos falsos o aproximativos, construido a partir de esa información que dan las grandes agencias ingternacionales (en manos de ya sabemos quienes) y los telediarios de la señorita Pepis. En una palabra: descartable. Para los que entienda el francés, este es un enlace sobre la cuestión siria de lo mejor y una fuente de información (o mejor dicho: de re-información) de primera calidad sobre el tema. http://www.infosyrie.fr/ En la Red Voltaire también se encuentra información y análisis con enjundia (sobre esta cuestión y otras) lejos del “periodismo” de Pepa Bueno o Ana… Leer más »
Infopsyrie es totalmente antiislamista y moderadamente pro Al-Assad. En el conflicto en curso apoya claramente al régimen sirio.