Debate sobre el estado de la Nación
Merece la pena escuchar a los jóvenes que vienen empujando. Aconsejo seguir este blog de coaching donde se sen las cosas con mesura y realismo: http://www.theopendream.com/debate-sobre-el-estado-de-la-nacion/
Escribo este artículo mientras Mariano Rajoy explica su labor de gobierno a la cámara, comenzando el debate sobre el estado de la Nación. Durante una hora y media larga, el Presidente evalúa sus acciones contrastándolas con los problemas existentes, las promesas realizadas, y los objetivos marcados. Es un ejercicio necesario para posicionar nuestro proyecto y tomar tierra, comprobar si estamos soñando o estamos despiertos. Evaluar todas las áreas que suponen la gestión de un país nos permite tomar perspectiva y tener una visión global. Si no somos metódicos a la hora de evaluar cada una de estas áreas, podemos caer en el error de creer que las cosas van bien o mal basándonos en impresiones pasajeras, parciales, o emocionales.
Hace ya un año, una buena amiga pasaba por una compleja situación laboral y emocional. Se levantaba cada mañana deseando no ir al trabajo, cansada, desmotivada, y sin ver una salida. La reacción fue ir pensado en dejar su puesto y buscar otra cosa. En un momento brillante decidió tomarse el tiempo de hacer balance, mirar a todas las áreas de su vida, ponerse nota, y sacar conclusiones realistas. Gracias a esta evaluación global, abrió los ojos y resolvió que su situación era realmente positiva, pero que requería de algunos ajustes para poder avanzar y sentirse mejor. Un año después, tiene una visión mucho más equilibrada y realista de su propio panorama. Si bien no es perfecto, es mejor de lo que era y ha avanzado sin tener que comenzar de cero.
Es importante que de vez en cuando paremos a hacer un debate interno sobre el estado de la Nación. Tomar un día libre cada cierto tiempo y, con un cuaderno o un buen amigo, hacer balance de nuestras acciones, contrastándolas con los problemas existentes, las promesas realizadas, y los objetivos marcados. Conviene también mirar a todas las áreas de nuestra vida, no sólo la que más nos moleste en ese momento. Podemos también preguntar a ese selecto grupo de amigos que nos dicen la verdad aunque nos duela, para tener aún más perspectiva.
Mariano Rajoy ha comenzado su debate sobre el estado de la Nación con cifras. Aunque sean frías, las cifras nos cuentan las historias de verdad, no las que imaginamos. Es muy fácil aferrarnos a la idea de que tenemos buenos amigos, pero si no hemos hablado o tomado café con un buen amigo en seis meses, quizá se está convirtiendo en un buen “viejo amigo”. Es cómodo pensar que gozamos de buena salud, pero hasta que no vemos los resultados de un análisis, o una marca de tiempo en una prueba física, no tenemos pruebas. Podemos pensar que estamos en búsqueda de empleo, pero si no contamos cuántos contactos profesionales hemos hecho, o a cuántas entrevistas hemos acudido, quizá sólo estamos soñando que tenemos un deseo de encontrar empleo, no una verdadera dedicación. Las cifras nos cuentan la historia de verdad. Nuestras emociones nos cuentan la evaluación subjetiva que hacemos de la historia.
Este post es una invitación a realizar un debate personal sobre el estado de las cosas. Como Presidente de la República Independiente de Nosotros Mismos, podemos hacer balance:
– ¿Qué problemas enfrentamos y qué estamos haciendo para solventarlos? ¿está dando resultado? ¿qué podemos cambiar para avanzar?
– ¿Qué promesas hemos hecho y cuáles hemos cumplido? ¿tenemos algo pendiente? ¿debemos pedir perdón o ponernos en marcha en algo?
– ¿Qué objetivos nos marcamos y cuánto hemos avanzado en conseguirlos? ¿revisamos nuestros propósitos? ¿celebramos nuestros éxitos? ¿aprendemos y corregimos desde nuestros fracasos?
Después podemos mirar a las distintas áreas de la vida: salud, vida emocional, social, intelectual, familiar, relaciones, laboral, económica, espiritual… ¿nos ponemos nota? ¿celebramos lo que va bien? ¿mejoramos lo que podría ir mejor?
Hacer este debate sobre el estado de la Nación es reconfortante. Por lo general ni nos va tan mal como creemos, ni tan bien como nos gustaría sentir en algunas cosas. Desde este balance podemos mirar hacia adelante con realismo, estrategia, y optimismo. No confundamos a un soñador con un iluso. Los soñadores del día son verdaderos estrategas.
Enlace al canal de radio por internet: “El Parlamento en cueros” http://www.ivoox.com/el-
