Gobernantes ineptos y falsos samaritanos
Por mucho que se empeñe el gobierno en lanzarnos sus mensajes de túneles que acaban, vestigios de mejora e inicio de un presente que apunta a un futuro de buenas perspectivas, la realidad demuestra lo contrario. Sus medidas siguen siendo auténticos despropósitos y cerrojazos a la esperanza. Nos habla de unos porcentajes y datos estadísticos que ya nadie cree, pues son tan falsos como sus promesas electorales. El pueblo está cansado de crespones negros exhibidos por una oposición que es la menos indicada para meter baza en el asunto y de las sábanas blancas que el gobierno exhibe en las ventanas de sus despachos para ocultar la podredumbre que se acumula en el interior. El pueblo se ha cansado de esperar inútilmente ese cambio en la mente y proceder de nuestros gobernantes y políticos que nunca llega. Todo tiene un límite y el de la paciencia del español hace ya mucho que se ha sobrepasado. Ya no sabe qué hacer, ni a que santo encomendarse, pues ha dejado de creer en los milagros y busca desesperado ese urgente y necesario mirlo blanco o líder carismático y honesto que sea capaz de devolverle la confianza.
Resulta que somos el segundo país de Europa después de Rumanía, donde la infancia pasa hambre, (el delito más grave y denigrante que un gobierno puede cometer) y se empeñan en salvar Bancos para que terminen arruinándonos con sus “preferentes”, usuras, desahucios y comisiones, en lugar de satisfacer las necesidades y el hambre de nuestros hijos. No se si la niña de la que tanto nos hablaba Rajoy en sus campañas padecerá estas carencias, pero creo que será una de las privilegiadas que no las sufre.
Se habla de las autopistas y la mala gestión económica que han tenido y sin la menor dilación Rajoy y el pequeño Montoro, se apresuran en acudir con 2.400 millones de euros para su reparación. Los mismos que bien empleados sin los chorizos habituales, (que no son precisamente de Cantimpalos), significarían la alimentación de nuestros hijos, que creo mucho más importante que hacer más cómodo el viaje del político o potentado de turno. Comparo este empeño en ofrecer de cara a la galería un exterior que no corresponde al angustioso y auténtico interior, con los trucos del cine y teatro, que esconden y falsean la realidad a base de decorados ante el espectador de la farsa, ajeno a los trucos del tramoyista y director de escena. Ocultan no solo la deteriorada fachada, sino el drama que viven sus personajes en la vida real. Todo es una falsa pantalla donde se ofrece un mundo inexistente que todos quisiéramos fuera realidad.
Recortan en educación, suprimen las becas, suben las tasas universitarias y ponen trabas a toda posible manifestación cultural. Se despreocupan de todo lo que signifique ayudar a la formación y cualificación de nuestra juventud, que es la mejor reserva que tenemos para asegurar el futuro de una España culta y preparada. No obstante, se dan prisa en arreglar Bancos y autopistas que al pueblo, dadas las circunstancias, son cuestiones que nada interesan. Es hasta vergonzoso tener que escribir esto y más aún, oírselo decir al gobierno con la mayor naturalidad.
Según Cáritas, organización perteneciente a la Iglesia y nada sospechosa por cierto de banderías ideológicas, el treinta por ciento de los españoles pasa hambre. Ni en la época de la posguerra con los comedores de Auxilio Social, pasaba esto. Y nuestros gobernantes y diputados, en lugar de reunirse con toda urgencia y adoptar una medida eficaz y rápida para solventarlo, evitando el bochorno internacional y la indignación popular interna, mira para otro lado y hasta el ya citado Montoro, que es mejor desaparezca de la escena política de una puñetera vez, contradice a la organización de caridad y la tacha de sospechosa. Ahora resulta que hasta las ONG son las causantes del desastre que padecemos. No es posible un mayor disparate.
Digo yo y perdonen que insista, si nuestros hijos pasan hambre y nuestras familias tienen que acudir a instituciones de caridad para comer; si nos hacen recortes en sanidad, en seguros sociales, en puestos de trabajo, se cierran las empresas por falta de liquidez y clientela y vamos directos a una hecatombe que los actuales dirigentes y políticos no saber como capearla, ¿Qué pretenden los que piden y exigen que se facilite la entrada y se atienda con más celo y cuidados que a los nuestros, a los miles de inmigrantes subsaharianos y magrebíes que, usando toda clase de tácticas asaltan nuestras costas con sus pateras y saltan las vallas fronterizas en Ceuta y Melilla?. Siento lástima de ellos pero mucha más de los millones de españoles que necesitan con igual urgencia nuestros cuidados y alimentos. ¿Han hecho cálculos de lo que nos cuestan en ropa, alojamiento, comidas y atenciones médicas en unos momentos en los que muchos de los nuestros carecen de todo?. ¿ Si en otros países europeos echan a los españoles que llevan tres meses sin encontrar trabajo, por qué España tiene que hacerse cargo de estos miles de extranjeros a costa de sacrificar aún más nuestras ya excesivas carencias?. Y encima vienen los de la UE a controlar como defendemos las entradas ilegales y masivas por nuestras fronteras, pero no se ofrecen estos samaritanos de pacotilla a abrirles sus puertas generosamente y hacerse cargo de ellos.
Yo les diría a esos voceros televisivos y al señor Cayo Lara, (que cada día quiere cobrar mayor protagonismo), que en lugar de criticar la actuación de la Guardia Civil, piensen en nuestros hijos y necesitados y mientras un español se tenga que ir a dormir con hambre y sin techo, nadie debe recibir lo que a él no podemos ofrecerle. Luego hasta resulta que las mujeres llegan en las pateras con niños que no son suyos, sino que los alquilan o compran para que al llegar le aseguren su estancia. ¡Vaya savia que nos llega para forjar una nueva España!.
¿No queríais DEMOCRACIA?. Pues, toooooooma DEMOCRACIA. Ademas de la buena, de la borbónica. =políticos= : ¡¡¡temblad!!! .
Yo, dado que la corrupción no pasa factura en las urnas, ya no creo en la ignorancia de buena parte de los votantes.
Empiezo a creer en la corrupción-ignorante, de buena parte de los votantes.
La casta mafiosa solo mira para ellos y para sus aduladores, amigos, familia y demas trepa. Aqui en España no existe una democracia, es un juego de poder entre dos partidos y los NAZIONALISTAS recogen las migajas.
Pero lo que se dice mirar por el pueblo, eso ni soñando, el que lo crea es tonto del culo. Pero temo que hay mucho tonto del culo.
ANDORRA COMPRA Y SE LLEVA LO MEJOR DE ESPAÑA
Los Andorranos libres e independientes están comprando propiedades en España.
Ahora compran incluso una casa construida por Gaudí, de lo mejorcito que hay, a los arruinados españoles (esto no pasaba ni cuando estaba ZP y había crisis mundial!). La han comprado!
Aumenta la cantidad de muertos causadas por incendios provocados por la pobreza energética, así como muertes y enfermedades provocadas por la pobreza alimentaria y la falta de higiene.
El PP mata, y no solo en Irak!!
El 84.5% de los españoles VE que la economía va fatal
El 15.3 % ni contesta o no se localiza porque está sin teléfono o homeless
El 0,2% no nota mucho cambio
El 0.1% no contesta , está en su yate de vacaciones, disfrutando de haberse quedado los clientes y los empleados baratos, de todos los que cierran, a quienes puede exprimir y echar a su antojo
VIVA ESPAÑA!
Toda esta realidad que resume tan bien le señor Arbolí en su artículo, (y otras que no cita pero que tristemente todos conocemos) nos la proyectan en una película hace tan sólo 30 años y sin duda que nos partimos la caja a la par que la catalogamos como más fantasiosa que la guerra de las galaxias. Pura y descabellada ciencia ficción, oiga! Valga la observación para entender hasta que extremo de manipulación e idiotización nos han conducido a base de ingeniería social para, en base a las aberraciones que padecemos, no sólo el pueblo español no haya armado otro… Leer más »
Y lo vergonzoso es que todo ese control lo hacen unos payasos analfabetos que son los que llamamos políticos. Son los que gobiernan nuestra nación y que tanto la oposición como ellos son la mediocricidad personificada. Nunca España tuvo un nivel tan bajo en nuestros dirigentes.