Caucásico, rubio y de ojos verdes. Le damos a ‘buscar’ y aparecen 9 perfiles con nuestras preferencias. No, no se trata de la última web de ligoteo, sino de Cryos, el banco de esperma más grande del mundo, que permite solicitar muestras en su página web que luego son enviadas en estado de congelación. Como si estuviéramos pidiendo una pizza online, pero en realidad estamos encargando un hijo.

Y no solo eso. Cuando estamos registrados, Cryos nos permite ampliar la búsqueda con opciones como la altura, el peso, la edad, los estudios o la personalidad, incluidos perfiles de inteligencia emocional. Y por si esto no fuera suficiente, también permite escuchar la voz del donante, almacenada en una grabación, para todas aquellas que crean que este rasgo es deseable.

Una vez elegida la muestra, Cryos la envía a casa en tan solo 24 horas y dentro de un tanque de nitrógeno (opción más cara) o rodeado de hielo seco (opción más económica), para que la compradora vaya a la clínica de fertilidad que prefiera para ser fecundada.

Los precios varían según el perfil del doante. Una muestra anónima cuesta 184 euros sn IVA. Si se adquiere de un donante no anónimo -uno de los que tienen perfil-, el precio se dispara hasta los 480 euros, también sin IVA. También existe la posibilidad de conseguir muestras de un donante en exclusiva, que no dará más a ningún otra mujer que lo solicite. El precio de este servicio es de 12.000 euros sin IVA.

Ilegal en España

Vamos, un menú a la carta en toda regla y un servicio a domicilio en toda regla. Solo hay un problema: en España este tipo de prácticas es ilegal. No se puede encargar una muestra de esperma de esta forma y solo las clínicas de fecundación pueden comprar esperma. ¿Eso impide a Cryos vender en España? La respuesta es no. Como otras páginas web que venden productos que son ilegales en nuestro país, la empresa danesa se ‘olvida’ de nuestra legislación y permite pedidos con destino la piel de toro.  Según informa Antena 3, la cantidad de muestras vendidas por Cryos en nuestro país aumentó un 100% durante el pasado año.

Cryos asegura que sus clientes son principalmente parejas heterosexuales en las que el hombre es estéril, seguidas de mujeres solteras mayores de 30 años y por último, parejas de lesbianas.

Hace un mes, Cryos protagonizó una polémica al ofrecer un viaje a mujeres cambio de que donasen sus óvulos. En Dinamarca es ilegal donar óvulos, por lo que la empresa se inventó esta estrategia para conseguirlos: pagaba un viaje y un hotel a una mujer, a un destino turístico que contara con un centro de fertilidad, y allí se recogerían las muestras, que luego serían comercializadas.