Artur Mas, aspirante a presidente de la Generalitat

EM.- El presidente de la Generalitat es un pozo sin fondo de propuestas imaginativas. En su afán de seducir a la CUP de que vote su investidura, Artur Mas ha planteado esta mañana una nueva oferta a los anticapitalistas: convertirse en un ‘president’ temporal. Pero tampoco ha servido para nada.

El resultado ha sido el mismo que en la sesión del martes, y por primera vez un candidato a presidente de la Generalitat pierde las dos primeras votaciones de investidura. Mas se quedó solo con los 62 diputados de Junts pel Sí; los 73 representantes de Ciudadanos, PSC, Catalunya Sí que es Pot y el PP votaron ‘no’.

La idea era que Mas se comprometía a someterse a una cuestión de confianza voluntariamente al final del periodo de sesiones, el próximo mes de julio. “Para que 10 meses después de su arrancada se pudiera valorar si el Govern merece continuidad para acabar el trabajo”, ha descrito, tras aclarar que ya puso ayer sobre la mesa la propuesta en la reunión que mantuvo en Palau con varios diputados de la CUP.

Al contrario que la moción de censura, que debe plantear la oposición, la cuestión de confianza la presenta el Govern y no precisa de que se proponga a un candidato a presidente alternativo. Si el Ejecutivo no la supera, cae.

Mas ha presentado la propuesta como “un intento de desencallar la legislatura, para que haya un Govern definitivo”. “Debemos demostrar que somos 72, como ustedes dicen, pero no con discursos, por la vía de los hechos. Si nadie mueve ninguna posición, los temas no se resuelven”, ha avisado a la CUP.

“Entendemos que son gestos relevantes, que no desnaturalizan la Presidencia de la Generalitat, la ocupe quien la ocupe. Incluso pueden reforzar al Govern y al president. Puede ser un camino de encuentro para tomar las decisiones definitivas, si pudiera ser hoy, y si no no demasiado tarde”, ha insistido Mas para implorar a la CUP los dos votos que le faltan a Junts pel Sí para la investidura.

El presidente de la Generalitat en funciones también se ha referido a la oferta que sí trascendió de la reunión de ayer, y ha confirmado que propuso a la CUP un Govern presidido por él pero cediendo poder a tres grandes vicepresidencias que ostentarían Oriol Junqueras (área económica), Raül Romeva (área de relaciones internacionales) y Neus Munté (área social).

Pero la CUP, que vota en asamblea todas las decisiones importantes, no ha cedido. De hecho, el discurso de su líder en el Parlament, Antonio Baños, ha sido de nuevo durísimo contra Mas, y la cara de los diputados de Convergència -que formó junto a ERC la coalición electoral Junts pel Sí- demostraba que han acusado el golpe.

Baños no sólo le ha dicho a Mas que no, sino también que las presiones -que estos días han menudeado en reuniones, tertulias y redes sociales- son contraproducentes. “No caeremos en la trampa de dividirnos, porque el objetivo es común y es irreversible, y lo tenemos en la punta de los dedos. No dejaremos pasar la oportunidad. Que nadie nos dé lecciones sobre qué es la unidad. Crear ruido no une, las acusaciones y gesticulaciones públicas, nos debilitan. Las cazas de brujas nunca han servido de nada”, ha dicho en este sentido.

“Nuestro voto está decidido. La CUP votará que no a la candidatura de Artur Mas. Es un no tranquilo. El sí a la República ni se acaba ni se agota esta mañana. Es por coherencia con nuestras promesas, no sólo electorales”, ha afirmado el diputado de la CUP, un partido que en campaña prometió que no investirá a Mas y que busca un candidato independentista “de consenso”.

El ‘no’ se extiende a la nueva oferta de Govern temporal de hoy. “Es una reelaboración de los acuerdos de Govern que ya tenían antes con ERC. No es de consenso. Pero encontramos en ella cosas interesantes. La cuestión de confianza nos acerca a una idea de colectividad que siempre hemos puesto sobre la mesa”, ha afirmado Baños. Pero el problema sigue siendo que no quieren que Mas sea president, y que Junts pel Sí se niega de momento a proponer a otro candidato.

La CUP, que se ha enfrentado durante años a las políticas de CiU en las calles, atribuye al presidente en funciones gran parte de la culpa de los recortes sociales de la Generalitat y de la corrupción de Convergència. En este sentido, Baños ha pedido “un poco más de respeto a la CUP, la única fuerza del hemiciclo que no está en ningún juzgado por corrupción”.

El representante de la formación anticapitalista ha concluido su discurso advirtiendo a Mas de que la repetición de las elecciones, que Convergència prefiere de momento a buscar a otro candidato, sería perjudicial para los independentistas. “Creemos en una mayoría estable, firme, que nos permita zarpar de una vez hacia la República catalana. En este trabajo estamos totalmente comprometidos. Las anticipadas son reaccionarias, no revolucionarias”, ha afirmado.

Pero quieren zarpar sin Mas. Baños lo confirmó en el turno de réplica: “El mandato democrático era la independencia, y no un nombre”.

Acuerdo antes del 10 de enero o elecciones en marzo

El presidente de la Generalitat, sin embargo, no se da por vencido. El reglamento establece que antes del 10 de enero debe haber investidura; si no, se convocarán automáticamente unas nuevas elecciones. Convergència tiene puestas ahora sus esperanzas en la asamblea que la CUP celebra el próximo 29 de noviembre, y que esperan que pueda desencallar la situación.

Mas ha intentado en todo momento que la resolución independentista aprobada el pasado lunes, que ya ha sido suspendida por el Tribunal Constitucional, le ayude a conseguir el favor de la CUP. Ha afirmado que las decisiones del TC no le influyen: “No se trata de saltarse la legalidad, sino sustituir la legalidad española por la catalana. No se trata de ir a la ilegalidad se trata de ajustarse a unos marcos legales diferentes”.

Pero, por primera vez de manera muy clara, Mas ha amenazado con forzar la repetición de las elecciones catalanas si la CUP no le apoya. “Si todos mantienen su posición de manera inalterada no puede haber acuerdo. Baños decía que hay tiempo. Hay, pero poco. Aunque reglamentariamente tenemos tiempo hasta principio de enero, razonablemente el plazo no debería ir tan lejos. En los próximos días se debe resolver en algún sentido. ¿No quieren elecciones? Pues valórenlo a fondo. Evidentemente es una opción. Pero después de haberlo hecho hace dos meses, y de tener mayoría aquí, pongámonos rápido. Si unos se mueven se deben mover todos. Cada día que pasa es un día contra el mandato de las urnas”, ha afirmado.

EL REY: “LA CONSTITUCIÓN PREVALECERÁ, QUE NADIE LO DUDE”

El Rey ha afirmado este jueves: «La Constitución prevalecerá. Que nadie lo dude. La razón de ser y el funcionamiento de nuestro Estado de Democrático de Derecho así lo garantiza. Nuestro Orden Constitucional, los principios constitucionales en los que se basa nuestra convivencia se mantendrán plenamente vigentes».

Don Felipe hizo estas afirmaciones durante la entrega de las acreditaciones a los nuevos embajadores de la Marca España, que ha sido el primer acto público con discurso al que ha asistido desde el último desafío independentista. El Rey aprovechó el acto, que se celebró en la nueva sede del BBVA, en Madrid, para «transmitir un mensaje de serenidad y confianza». Relató que «después de tantos avatares históricos que condujeron a nuestro país a crisis, enfrentamientos y fracasos», el pueblo español «optó —sabia y definitivamente— por la vía de la concordia y de la convivencia; del entendimiento y de la democracia».

Afirmó que el pueblo español «hace del cumplimiento de la ley ?de la ley democrática que nace de nuestra Constitución? su guía y su referencia diaria» y que es «un pueblo que no está dispuesto a que se ponga en cuestión su unidad, que es la base de su convivencia en paz y libertad». Un pueblo, añadió, «que no está dispuesto a que se ponga en riesgo el modelo de progreso que, con su trabajo abnegado y comprometido, ha hecho posible el periodo de mayor desarrollo económico y social de nuestro país».

También relató que «en nuestra larga historia hemos sabido superar grandes dificultades y los mayores desafíos. Ahora no es tiempo de regresar al pasado, sino de reafirmarnos en nuestra voluntad de un presente y un futuro de progreso compartido y de convivencia democrática».

Por ello, añadió, «hoy quiero transmitir un mensaje de serenidad y confianza. La Constitución prevalecerá. Que nadie lo dude. La razón de ser y el funcionamiento de nuestro Estado Democrático de Derecho así lo garantiza. Nuestro Orden Constitucional, los principios constitucionales en los que se basa nuestra convivencia se mantendrán plenamente vigentes. Porque la España constitucional de nuestros días es un patrimonio que nos pertenece a todos; pertenece al pueblo español en quien reside la soberanía nacional y del que emanan todos los poderes del Estado».

Don Felipe terminó transmitiendo «un mensaje de seguridad en la unidad y continuidad de nuestro proyecto de convivencia nacional. Un proyecto, un compromiso colectivo con nuestra convivencia democrática en el que el Rey, como Jefe del Estado, estará siempre al lado de todos los españoles», concluyó.

Cuando Don Felipe terminó su intervención, el público del auditorio se puso en pie y dirigió un largo aplauso de minuto y medio de duración al Monarca. Además, se gritó un «Viva el Rey».

Los Reyes entregaron este jueves las acreditaciones a los ocho nuevos embajadores honorarios de la Marca España, dos de los cuales son catalanes, otros dos son vascos, otros dos gallegos, y uno valenciano: la alpinista Edurne Pasaban (en la categoría de Deportes), la soprano Ainhoa Arteta (Cultura y Comunicación), el empresario Pablo Isla, que recogió Ramón Renón, (Gestión Empresarial), los cocineros Joan, Josep y Jordi Roca (Turismo y Gastronomía), el Instituto Valenciano de Infertilidad (Ciencia e Innovación), Cáritas España (Acción Social), el Camino de Santiago (Relaciones Institucionales), que recogió Alberto Núñez Feijóo, y al político y empresario Josep Piqué (acreditación extraordinaria).

En nombre de los nuevos embajadores, intervino la soprano vasca Ainhoa Arteta quien afirmó que para «tener un país cohesionado territorial y socialmente, en el que la cultura prevalezca por encima de la insolidaridad, hay que potenciar tres cosas: educación, educación y educación».