Si el FC Barcelona este año parece intratable, pese a los dos últimos empates en Liga y otro en Champions League, es sobre todo por los números de sus tres delanteros: Neymar Jr, Luis Suárez y Lionel Messi.

Hasta el día de hoy, de hecho, el trío conocido también como MSN (el acrónimo de las iniciales de los tres jugadores) ha cosechado la cifra impresionante de más de 120 goles, es decir más goles que el resto de cualquier otro equipo europeo. Un dato escandaloso que refleja el poder de este trío de delanteros que tal vez sea ya el mejor de la historia del fútbol y seguramente sea el más completo y funcional.

Y es que los tres jugadores se completan de manera perfecta y espectacular, lo que lleva a un resultado apabullante en cuanto a paredes, combinaciones y, obviamente, goles. El mismo Luis Enrique, técnico blaugrana, confesó en rueda de prensa que “si uno de los tres no marca la fiesta no es completa”. Estas declaraciones llegaron después de la contundente victoria por 4 a 0 contra la Real Sociedad el pasado 28 de noviembre en el Camp Nou. De hecho en los últimos doce meses los tres jugadores han cuajado una serie de partidos en los que han marcado al menos un gol cada uno.

El primer partido en los que anotaron un tanto los tres fue el del 10 de diciembre 2014 contra el Paris Saint Germain en la Champions: un 3 a 1 que dio a los blaugrana el liderato en la liguilla. Sin embargo el recuerdo más importante es el del 11 de enero pasado, cuando en el 3 a 1 contra el Atlético Madrid anotaron un gol cada uno y pasó a la historia la foto que fue tomada de los tres celebrando en un abrazo colectivo. Tres días antes, en el 5 a 0 endosado al Elche, Neymar había anotado un doblete, mientras que Messi y Suárez habían marcado un gol por cabeza.

Estos datos Bwin son solamente una muestra empírica y numérica de la fuerza de este trío demoledor que parece no tener techo. Ahora que Messi no necesita meter muchos goles para marcar la diferencia, su tarea puede ser más la de un pasador y armador de juego, ya que Suárez puede definir perfectamente cualquier acción y Neymar también.

El brasileño, además, prefiere empezar por la izquierda, llegando entonces a mezclar bien tanto con el argentino como con el uruguayo, que ocupa la posición de delantero centro catalizador de juego y abridor de espacios a la vez.

La MSN ya es una máquina engrasada y puesta a punto para cualquier ocasión. Con estos tres arriba el Barcelona puede ganar a cualquier rival en España y en Europa. La contundencia de una delantera tan completa y certera es la máxima garantía para Luis Enrique, que hasta que pueda contar con los tres podrá dormir tranquilo.