Trabajo digital
Ante los cinco millones de parados que viven en nuestro país es el momento de plantear más alternativas de posible empleabilidad. El denominado trabajo online o remoto es una de las posibilidades existentes actualmente.
Ciertamente, las ventajas del teletrabajo son considerables. También tiene desventajas, pero pienso que partiendo de una mente creativa y emprendedora se puede llegar a buenos resultados económicos. De hecho, los negocios digitales a través de blogs o plataformas digitales están presentes en el mercado.
Son útiles para vender conocimiento e información a través de productos propios. Aunque esto requiera unos procedimientos digitales específicos que deben ser los más adecuados para que, al menos, la mayor parte de los beneficios monetarios vayan a las manos de los creadores o trabajadores.
El trabajo en Internet supone, entre otras cosas, aprovechar el potencial de nuevas formas de trabajo. Y también los esfuerzos sostenidos y constantes a través del teletrabajo estimulan y potencian la creación de conocimiento, y desarrolla e incrementa las capacidades de los trabajadores en la nube.
Están aumentando las ventas a través de Internet, por lo cómodo que es comprar, por medio del ordenador, la tableta o el móvil. Nadie pone en duda que la era digital ha abierto un sinfín de posibilidades de negocio, y de desarrollo profesional en la red.
En el trabajo online los gastos se recortan enormemente. La comodidad es otro de los aspectos positivos. Los horarios suelen ser muy flexibles, al contrario que en la labor presencial, al trabajar desde casa. También desaparece el estrés del control presencial.
En cualquier caso, es posible que, al trabajar en la red, se pueda tener más de un trabajo. Los trabajos online suelen ser estar orientados a tareas específicas lo que hace aumentar, en general, la eficiencia y la productividad de los trabajadores.
A esto se añade que el estilo de vida se ve mejorado, ya que la persona que trabaja desde su domicilio es más libre en la disposición de su tiempo. No está atada a horarios férreos, y dispone de una calidad de vida mayor. Y la separación entre trabajo y ocio no es tan tajante, ya que las fronteras entre ambos no están muy claras, sobre todo en trabajos creativos, como escribir.
De todas maneras, estoy convencido de que, en los próximos años, la monetización del trabajo online debe ir creciendo de modo rápido, ya que sería una fuente de ingresos vital para muchas personas que trabajan elaborando contenidos digitales de diversos tipos.