López Negrete intenta ahora desvincularse de Manos Limpias pese a ser su «jefa jurídica»
Virginia López Negrete ha puesto en marcha una estrategia para desvincularse de Manos Limpias. Ayer, a su llegada al juicio del caso Nóos, dijo a los medios que «mi decencia profesional me hace estar aquí hoy y lo que tengo que hacer es seguir con el encargo y el mandato que tengo de mi cliente». Virginia López nunca se dirigía al sindicato como «mi cliente», sino que hacía gala de ser la «jefa de Asesoría Jurídica» de una organización cuya única actividad es la de acudir a los tribunales (no realizan tareas sindicales). Así lo acreditan infinidad de intervenciones en medios de comunicación y documentos.
Es el caso de un escrito que la letrada presentó en el juzgado del magistrado José Castro en febrero de 2013, durante la instrucción del caso Nóos. Negrete ponía el grito en el cielo porque la abogada Montse Suárez, que era colaboradora del Manos Limpias, estaba apareciendo en televisión hablando de la causa.
«A Manos Limpias nos preocupa enormemente la presencia de elementos extraños y ajenos que se introducen en los debates televisivos haciéndose pasar por lo que no son y haciéndose pertenecedora donde tampoco lo es, es decir, esta Señorita (sic) no pertenece a Manos Limpias ni es Letrado en nuestra organización». Quienes ahora son «mis clientes», antes era «nuestra organización».
«Yo soy Manos Limpias»
«Esta Señorita nada tiene que ver, en ningún sentido, con el sindicato Manos Limpias al que represento», continúa el escrito.
El cargo de «jefa de la Asesoría Jurídica» se lo otorgó Miguel Bernad e incluso hicieron tarjetas de visita. López Negrete envió un escrito a un empresario investigado, el dueño de la empresa de seguridad Esabe, con esa tarjeta y haciendo gala de ese cargo para que le pagara 7.000 euros mensuales.
También se presenta de ese modo en su blog, con motivo de una causa colectiva, la estafa de Ads Broker. Bajo el título «Basta de estafas y corrupción!» dice en el apartado «sobre mí» que es «directora Asesoría Jurídica Manos Limpias». De hecho, en innumerables ocasiones ha usado este cargo para conseguir clientes. Además, la letrada llegó a trabajar durante un año en la sede del sindicato, en la calle Ferraz, donde ocupó un pequeño despacho junto al de Miguel Bernad.
Virginia López no se encuentra entre los imputados («investigados» en la nueva nomenclatura jurídica) del caso Manos Limpias-Ausbanc, pero cuando ayer citaba su decencia obvió la otra causa judicial que afecta a Manos Limpias, en la que comparte imputación con Miguel Bernad. La letrada se ha negado a declarar por dos veces en el Juzgado de Instrucción 18 de Madrid, la última el pasado 1 de marzo porque la comparecencia «iba a ser grabada en vídeo».
En metálico
La Fiscalía se querelló contra Virginia López y contra el líder de Manos Limpias, Miguel Bernad, por repartirse en metálico 109.600 euros que procedían de aportaciones de afectados de la estafa de Afinsa.
Bernad autorizó una transferencia de 110.800 euros de una cuenta del sindicato en Madrid a otra particular que Bernad y López habían abierto en una sucursal del BBVA en Valladolid. En febrero de 2011 ordenaron devolver esa cantidad a la cuenta del sindicato. A continuación, el secretario general de la organización retiró en efectivo 103.500 euros. Le dio la mitad a Virginia López en metálico para el «pago de honorarios», pese a que los abogados del sindicato no cobran y ella misma así lo ha manifestado públicamente. Bernad se quedó la otra mitad, también en efectivo, para abonar «deudas de Manos Limpias». No han presentado ningún documento que lo demuestre.