Sin prueba de acceso a la Universidad
Aunque puede parecer utópico e irrealizable que no se realice la PAU, es algo posible. En Francia, por ejemplo, el título de bachiller permite el acceso directo a cualquier universidad, en teoría. Aunque en algunas facultades establecen pruebas. Y no me parece algo descabellado.
Se podría poner en funcionamiento un sistema o baremo de nota media del bachillerato, de tal forma que los alumnos con un promedio de calificación más alto pudieran acceder a las carreras con menos plazas. Y los estudiantes que quieren cursar estudios universitarios, sin numerus clausus, con notas menos elevadas podrían empezar su formación superior.
Ya que, en mi opinión, pensar que es necesario contar un 60% la media de los dos cursos de Bachillerato y un 40% de la PAU, parece que es poner en evidencia el nivel de formación de los centros de enseñanza media, o no confiar en el mismo. Ya que, si la formación en los institutos en el Bachillerato es muy exigente, se puede presuponer que no haría falta la selectividad. De hecho, en las programaciones didácticas los contenidos a impartir son profundos y amplios, porque los alumnos tienen que demostrar un determinado nivel de conocimientos para obtener su calificación.
En el Reino Unido para las carreras de grado se necesitan titulaciones de formación profesional, aunque también existan requisitos de acceso en cada carrera. En Alemania la enseñanza secundaria está dividida, y cuenta con diferentes orientaciones. Los alumnos que quieren formarse en la Universidad estudian en un tipo de centro denominado Gymnasium, y realizan las pruebas de Abitur.
Está claro que la Selectividad en España ha servido para garantizar que los estudiantes que acceden a estudios superiores llegan con los conocimientos, y también la capacidad suficiente para culminarlos con éxito.De todos modos, parece que la reválida de Bachillerato va a ser la sustituta de la PAU. Y con un formato muy parecido.
Si bien, en junio de 2017 la reválida no tendrá efectos académicos, ya que, si el alumno suspende, podrá titular. Habrá, parece ser, 17 modelos distintos de examen, como hasta ahora. Aunque se fijan por el Gobierno central unas características iguales, por ejemplo, en lo relativo al número y tipo de exámenes. Por supuesto, si en las próximas elecciones del 26 de junio el PP logra formar gobierno. Si esto no sucede, todo volverá a cambiar.
Desde mi punto de vista, considero que sería mejor derogar la LOMCE, y elaborar una nueva ley educativa contando, realmente, con toda la comunidad educativa. Sobre todo, teniendo muy en cuenta lo que dicen los profesores que son los auténticos protagonistas de la educación. Su experiencia, y su saber hacer son determinantes para mejorar la calidad de la formación que se imparte a los estudiantes.
Ya que son los que están en las aulas, y conocen, de primera mano, el nivel de los alumnos, y sus dificultades en el aprendizaje de las distintas asignaturas. Desde los despachos, difícilmente, se conocen las problemáticas propias de los estudiantes y de los docentes.
Da igual el nombre que le pongan o los acuerdos a los que lleguen los gobiernos en materia de educación en las escuelas, si a la familia y a la sociedad le impiden poder educar a los niños en sus casas como se debería. Más bien pienso que lo que buscan desde el principio es el adoctrinamiento al estado, la sumisión, el borreguismo y la masa. Aparte de poner unos filtros de entrada a las carreras y formación limitando plazas y recortando profesores, que es lo que vienen haciendo hasta ahora.