La deuda de la Generalitat rozará los 80.000 millones de euros a fin de año
La deuda financiera de la Generalitat sigue creciendo al galope, tras haberla duplicado en apenas seis años. Sin haber aprobado aún sus presupuestos para el presente ejercicio, ya da por hecho que, como mínimo, la aumentará en otros 1.300 millones de euros más, lo que supondrá que a final de año el endeudamiento del Gobierno catalán se habrá elevado hasta rozar los 80.000 millones de euros. Y esto como mínimo, porque desde hace años las previsiones de sobrendeudamiento de la Generalitat se han ido superando con creces ejercicio tras ejercicio, muy por encima de lo previsto en cada uno de sus presupuestos anuales.
La asfixia es tal que el dinero que necesita recibir prestado este año la Generalitat equivale prácticamente a todo el presupuesto de la Sanidad pública catalana. Dicho de otra forma, que si no fuera por ese gran volumen de dinero que pide prestado, no tendría dinero para abrir sus hospitales y centros de salud. Algo que, sin embargo, no le ha impedido presentar unas cuentas para este año que dobla el gasto previsto para su departamento de «relaciones exteriores», o seguir incidiendo en su deriva independentista tratando de armar su pretendida Hacienda secesionista.
Según las cuentas que ha presentado el Ejecutivo de Puigdemont para este 2016, la Generalitat necesita recibir prestados este año 8.375,5 millones de euros para cuadrar sus cuentas, para mantener a flote su sector público. Las partidas dedicadas a Sanidad ascienden a 8.745 millones de euros.
Ahogada por las deudas, la Generalitat lleva años subsistiendo gracias al dinero que le presta el Gobierno central. Incapaz de acudir con solvencia a los mercados ordinarios de deuda, sus finanzas han pasado a ser avaladas por el Estado de forma creciente.
A costa del Estado
Entre los años 2012 y 2014, el Estado le inyectó a la Genralitat algo más de 32.000 millones de euros en ventajosos préstamos, fundamentalmente por la vía del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y el fondo para pago a proveedores. El año pasado el Estado suscribió casi 11.000 millones de euros más de deuda pública catalana, y este año Puigdemont aspira a que le inyecte al menos otros 7.500 millones por la misma vía.
Si Puigdemont ve cumplido este plan, supondrá que al terminar el año el Estado tendrá en sus manos unos 51.000 millones de euros de deuda de la Generalitat, sobre un total de unos 80.000 millones de euros de endeudamiento del sector público catalán.
El pasado 1 de enero la Generalitat ya sumaba 74.600 millones de euros de endeudamiento. De ellos, 72.274 correspondían a deuda de la Administración catalana propiamente dicha, y 2.394 millones a la deuda financiera de sus empresas públicas.
El 22% del presupuesto, para la deuda
Su abultada deuda le costará este año a la Generalitat 8.182 millones de euros: 1.140 millones por intereses y el resto, 7.042 millones, por los vencimientos de deuda a los que tiene que hacer frente, el dinero que un día le prestaron y que ahora le toca devolver a quienes se lo dejaron.
El 22% del presupuesto total de la Generalitat para el presente año se irá para pagar deuda, tanto vencimientos como intereses. Y eso que éstos, gracias a las ventajosas inyecciones financieras del Estado, se han aliviado respecto a años anteriores.
Camareo, pónganos otra ronda de embajadas, que paga el FLA. Y tráiganos también unas esteladitas, que se me seca la boca de tanto reir.
Se le va a electrizar la peluca cuando los tenderos manden al chaval de los recados a cobrar la factura.
Lo anterior es ficción; en los vividores de lo público predomina el rostro de hormigón armado y la huida hacia adelante (hacia las islas Caimán)
En Cataluña han despilfarrado miles de millones de euros en un dialecto que no sobrepasa el millón de lectores. Mejor se hubiese usado para promocionar el idioma español en África.
Dialecto me río en tu puta cara facha de mierda .Ya is quería pillar a todos os desconectava el cuenta gotas q tenéis putos tarados franquistas.
Si pero, espanya ens roba.