Un lituano herido en un tiroteo con un grupo de etnia gitana en Sumacàrcer (Valencia)
Una persecución con disparos que podría haber acabado en tragedia. La localidad valenciana de Sumacàrcer vivió unos minutos de angustia tras el violento enfrentamiento entre un vecino de nacionalidad lituana y un grupo de etnia gitana. La plaza de la Era, un espacio ocupado habitualmente por una gran cantidad de niños, fue el escenario en que se produjo este tiroteo que acabó con el vecino lituano herido tras recibir un disparo en el brazo izquierdo y perder una gran cantidad de sangre.
Faltaban unos minutos para las seis de la tarde. La localidad había celebrado el domingo una jornada festiva especial, con lo que la presencia de menores, afortunadamente, era bastante más reducida que en otras ocasiones.
En ese momento, un vecino lituano de algo más de 30 años, de complexión fuerte y 1,90 metros de estatura, que, según fuentes de la investigación, se encontraba bajo los efectos del alcohol, se acercó hasta un grupo de gitanos que, según las mismas fuentes, estaba cantando y tocando la guitarra tras, al parecer, haber consumido también alcohol.
El hombre les recriminó que hicieran tanto ruido y, en ese momento, se inició una pelea que incluyó empujones y algún puñetazo. La gran fortaleza física del lituano hizo que, en una primera instancia, fuera él quien golpeara en más ocasiones a algunos miembros de la otra familia. Sin embargo, la reacción de quienes se llevaron la peor parte fue ir a un domicilio, sacar una pistola de pequeño calibre (22 milímetros) y dirigirse hacia el lituano.
En ese momento, se inició una persecución entre gritos que generó el pánico entre quienes circulaban en ese momento por la calle. «Ha sido horrible. Había algunos niños por la calle y nos tuvimos que esconder», recuerda un vecino, quien afirma que escuchó alrededor de cuatro disparos, uno de los cuales impactó en una pared y otro en el brazo izquierdo del joven perseguido que, según los vecinos consultados, «no es mala persona, lleva unos 15 años viviendo aquí, pero cuando bebe…». El hombre, que habitualmente se dedica a tareas agrícolas y estuvo casado, aunque actualmente estaba separado, tuvo que ser atendido de urgencia e incluso se le practicó un torniquete para evitar que siguiera perdiendo sangre por el brazo.
Minutos después de lo ocurrido, la Guardia Civil detenía a dos personas por su relación con estos hechos. «El año pasado hubo un incidente con amenazas de muerte, pero lo de esta tarde (por ayer) ha sido demasiado», recordó este mismo vecino.
Pequeño calibre…22 mm. Ignorantes. Calibre 22, (centésimas de pulgada), ó 5.56 mm.
22 mm. sería un cañón antiaéreo como mínimo, y le habría amputado el brazo aún si fuera un roce.
Yo me hubiera unido al lituano
Y luego se preguntan porque la RAE los define como los define.