Evasión a Suiza
El registro, por parte de la Guardia Civil, de la sede del Banco Santander en Boadilla del Monte en Madrid es la gota que colma el vaso de la paciencia de los contribuyentes. Porque es la prueba de que la investigación iniciada hace varios años sobre evasión fiscal y blanqueo de capitales está afectando a 600 titulares españoles de cuentas opacas, con un valor cercano a 6.000 millones de euros en la sede suiza de HSBC. Es cierto también que el Santander ha indicado que, en todos los contratos se incluyen cláusulas que señalan las responsabilidades fiscales de los titulares de las cuentas.
Pero esto no es suficiente, a la vista de lo que se ha descubierto a través de las investigaciones. También fuentes del BBVA han informado de que el banco tomó la determinación hace años, de poner fin a sus operaciones en paraísos fiscales. Claro reconocimiento de lo que no tenía que haber hecho.
El inicio de estas pesquisas tiene su origen, en la gran cantidad de datos sobre evasión fiscal facilitados por el empleado del HSBC Hervé Falciani, su lista ha causado un gran impacto mediático, y ha sido muy útil, judicialmente hablando, porque ha permitido tirar de los hilos. Y es significativo que, entre los titulares españoles de cuentas opacas, figuraban también varios miembros de la familia Botín.
Han sido cometidos, presuntamente, delitos contra la Hacienda Pública, y blanqueo de capitales, según la Audiencia Nacional. El juez De la Mata investiga, si el HBSC tomó parte en el manejo de dinero ilícito de sus clientes, etc. Según la ONIF, que investiga el fraude a Hacienda, podrían haber existido conductas de ocultación de rentas y patrimonios, por parte de la entidad bancaria suiza HSBC.
Y además, se están investigando bastantes cuentas de españoles en todas las comunidades autónomas salvo en Aragón, Extremadura, Galicia, Asturias y La Rioja. Pensando en todo esto, ciertamente, la confianza en algunos bancos puede resentirse, al menos, en algunos aspectos. Es evidente que ganar dinero y obtener beneficio es lo propio del sistema bancario, pero existen límites legales y éticos. Y han saltado por los aires.
El poder del dinero es tal, que los ahorradores reciben intereses irrisorios y ridículos, supuestamente, por causa del Banco Central Europeo, y por otros motivos, especulativos o no, que son injustos e irracionales, en relación con el bienestar de los ciudadanos. Porque no debe olvidarse que son los clientes de los bancos.
Es necesario que exista un mayor control de las operaciones de los bancos. Además, los estados europeos, en mi opinión, no deberían sostener una política económica y una regulación bancaria que facilite la concesión de préstamos, a un interés de devolución, que es muchísimo mayor, que los intereses que dan en relación con los depósitos de dinero. Ciertamente, es vergonzoso que el sistema económico funcione de esta manera. Habría que cambiarlo radicalmente. Al menos, en lo que acabo de indicar. Y también, en otras cuestiones.
Por ejemplo, los enormes beneficios anuales de los grandes bancos, no pueden aumentar, casi a capricho, y, que, en cambio, los ciudadanos vean como sus sueldos e ingresos no crecen, o lo hacen muy poco. Sería exigible un mínimo de proporcionalidad.