El Ayuntamiento de Madrid ha decidido cambiar este año el modo de celebrar el próximo 24 de junio el día del patrón de la Policía Municipal, San Juan Bautista, una jornada en la que no habrá desfile militar ni eucaristía y tampoco los cócteles con alcohol habituales, que se suprimen por un “desayuno con bollería”.

La decisión se ha adoptado en el seno de una comisión para la organización de la fiesta de la Policía Municipal formada por un subinspector, miembros del gabinete de prensa, un sargento y un cabo encargados de las pruebas deportivas, así como la dirección del cuerpo.

Que este año sea el 40 aniversario de San Juan Bautista como patrón de la Policía Municipal de Madrid (así se acordó en 1976) no es, ni mucho menos, motivo de celebración para la alcaldesa de la capital. Lejos de preparar una celebración algo más especial que otros años, parece que Manuela Carmena ha tratado de minimizar al máximo el día del patrón de los municipales eliminando del programa de actos la tradicional misa celebrada en la catedral de La Almudena y el desfile de los policías el día de la entrega de condecoraciones.

El día del patrón del año pasado el equipo de Gobierno de Ahora Madrid apenas llevaba diez días en Cibeles y no pudieron cambiar nada, pero este año ha eliminado toda tradición de forma radical.

Para empezar, el escenario del principal acto solemne, que se celebraba el 24 de junio en el Parque de El Retiro. El concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, se lleva el acto al auditorio de la Casa de Campo, poco o nada transitado por los madrileños. Lo que peor ha sentado en el Cuerpo es este cambio de ubicación y la supresión del desfile del acto solemne. Y es que, aunque no es novedad que los actos castrenses no son del agrado de Ahora Madrid, la sensación generalizada en el Cuerpo es que el ejecutivo municipal vuelve, de alguna forma, a renegar de «sus» policías; algo que ya sintieron con la explicación del Plan Director y las continuas referencias a la «represión policial» por parte de distintos concejales de Ahora Madrid.

Para el acto solemne de este año (es el viernes, 24 de junio, dos días antes de las elecciones generales) Barbero también ha realizado otras «pequeñas modificaciones»: se suprime el «vino español» que cerraba la ceremonia y elimina el tradicional desfile del Cuerpo.

«Parece que se avergüenzan de nosotros, de lo que representamos y de nuestra labor. Es como si quisieran pasar de puntillas por ese día, que es nuestro día», comenta un alto mando policial.

Durante el desfile, van pasando las distintas unidades policiales y desde megafonía se da una pequeña explicación para que el ciudadano sepa a qué se dedica cada una de ellas.

Desfile de tipo militar

El Consistorio explica que suprime el tradicional desfile porque “ningún cuerpo de las fuerzas de seguridad del Estado tiene un desfile de tipo militar” que es propio de los cuerpos militares y que además supone un “gasto en efectivos y horas extras” que el nuevo equipo de Gobierno prefiere destinar a “otras necesidades en la ciudad”.

Aunque lo cierto es que este año no habrá más mucho más público que los familiares de los condecorados e invitados institucionales. En el parque de El Retiro contaban con la ventaja de que cualquier vecino de la capital podía acercarse a ver el acto.

«Era una forma de que los ciudadanos, para quienes trabajamos, nos conozcan un poco mejor. Y también era un honor para nosotros celebrar nuestra fiesta con la gente; tenía más sentido». Pero este año se celebrará en un recinto cerrado en la Casa de Campo. «Llevarlo ahí es una forma de esconder a la Policía», comentaba ayer otro agente. Según el programa oficial del Ayuntamiento, el acto comenzará a las 10:00 horas con el reconocimiento y entrega de condecoraciones a instituciones, profesionales y miembros del Cuerpo de Policía Municipal y después se realizará el homenaje a los caídos. Tras este gesto, se procedía al desfile pero, esta vez, se saltan este paso y pasan directamente al concierto ofrecido «por las bandas de Música del Cuerpo de Policía Municipal y del Ejército de Tierra».

Este concierto se daba con un pequeño piscolabis en el que los policías, mandos y políticos alternaban un rato en ambiente distendido. «Es una pena que lo quiten, pero bueno, es lo que mejor se puede entender por el hecho de no gastar dinero, aunque no era un gasto excesivo y creo que era bueno para el colectivo en general», opina un agente.

El Ayuntamiento entiende que el desfile “quitaba el foco” al acto de la entrega de medallas -que se mantiene- y que este año se quiere reforzar porque destaca “la labor ejemplar de la Policía Municipal”.

Institución aconfesional

En cuanto a la misa, el gobierno de Manuela Carmena (Ahora Madrid) ha decidido no incluirla en los actos al entender que es una institución “aconfesional”, aunque fuentes municipales comentan que “por supuesto que se incluirá en programa si alguna organización de policías o un grupo decide organizarla”, en cuyo caso habrá publicidad de la misa.

Sí se mantendrán las actividades de pruebas físicas y deportivas, una exhibición unidad canina y otra de la unidad ecuestre, y habrá castillos hinchables y talleres para niños además de proyectarse un vídeo sobre “policía y diversidad”.

Lo cierto es que en los mentideros policiales se comenta que ya el año pasado se vio a los representantes municipales algo incómodos en el acto, pero estaban recién llegados.

«Vergonzoso»

El sindicato CPPM calificó de «vergonzoso» que se eliminen las tradiciones «de una forma tan sectaria». «Deberían sentirse orgullosos de la Policía que tienen pero por mucho que nos metan en auditorios no van a conseguir silenciarnos», explicó ayer el portavoz sindical, Julián Leal. «Es una falta de respeto al Cuerpo y es una decisión tomada de forma unilateral, como todas». Desde CSIF explican que «hay malestar porque se ha hecho sin previo aviso». «No ha sentado bien porque a los policías les gusta que la gente participe del día del patrón».