Masacre y Tercera Guerra Mundial
Expreso, mi más profunda solidaridad, con las víctimas y los familiares de los más de ochenta muertos por el atentado de Niza, y también con la ciudadanía francesa, y el gobierno francés. Esta atroz y salvaje masacre pone de manifiesto, una vez más, entre otras cosas, que no se está seguro en ningún espacio público, o eso parece, al menos.
La lucha contra el Estado Islámico, que Hollande ha dicho que redoblará, puede no ser suficiente. Y lo digo con todo mi respeto por su labor. Ya que con ataques aéreos no creo que se acabe con el ISIS. Al contrario, puede incrementar el ansia de venganza de los yihadistas, ante la muerte de sus combatientes y, sobre todo, de sus líderes. Considero que la mejor estrategia sería una invasión terrestre con infantería, por parte de varios países que decidieran asumir los riesgos de la intervención. También es verdad que existen focos de yihadismo o islamismo radical en África y en otras zonas de Asia, pero, de momento, lo que más afecta son los atentados del Daesh.
Creo que, tal vez, estemos ya en una especie de Tercera Guerra Mundial larvada, en sus inicios. Porque, si los atentados yihadistas se van a prolongar durante años y años, las cosas, probablemente, irán a peor. Conviene extirpar el mal de raíz. Porque actuar a medias no sirve de mucho, por lo que se está viendo.
También es cierto que la labor de las fuerzas de seguridad es encomiable. Pero eso no significa que lo puedan controlar todo. En el caso de Niza supongo que habrá una investigación, para averiguar cómo pudo entrar el camión en el paseo marítimo, y causar la tremenda masacre.
Francia va a prolongar tres meses más el estado de excepción, algo entendible y que está bien. Pero parece que no es garantía absoluta de que no sigan produciéndose atentados terribles. También es verdad que, sin estado de excepción en el estado galo, los atentados, probablemente, serían bastantes más.
El causante de la masacre era un tunecino y francés de 31 años y residía en Niza, con antecedentes por delitos comunes. En cualquier caso, en Francia existe más riesgo de atentado, porque al existir un mayor número de musulmanes, entre los mismos, puede haber elementos yihadistas. Con esto no estoy diciendo nada en contra de los islamistas pacíficos que son la inmensa mayoría. La cultura islámica, en sí misma, es bella y magnífica.
Que el día de conmemoración de la toma de la Bastilla, la fiesta nacional francesa, un día de exaltación de la libertad, la igualdad y la fraternidad, se haya producido este salvaje atentado terrorista ha dejado consternada a Francia y también al mundo.
Señalan la luna y miramos el dedo islamista.
Tiras una bomba atómica en la Meca y verás como se arregla.
¿Nivel 4 y que no hubiese un anillo de bloqueo en una concentración importante de personal? Que seguridad es esa, Europa está muy aburguesada y muy blanda, excepto con el contribuyente honrado. Aguantar el mensaje mediatico de la preocupación del F/N y de la islamofobia. Están paranoicos y obsesionados con el fascismo con la derecha y con la gente normal , es para alucinar.
Tiene razón, no es suficiente. Hollande debería dimitir.
Ni arrasando Siria, ni el ISIS, ni aumentando los controles policiales. Todo pasa por prohibir el islam.