La policía registró inmuebles en 60 ciudades en el oeste de Alemania y en Berlín

El gobierno alemán ilegalizó este martes la organización islamista La Religión Verdadera y lanzó una gran operación en la que cientos de agentes registraron 190 instalaciones, entre mezquitas, oficinas y viviendas, en 10 estados federados.

El Ministerio del Interior indicó en un comunicado que el grupo prohibido infringe el orden constitucional y que entre sus integrantes hay posibles partidarios del Estado Islámico.

El ministro del Interior alemán, Thomas De Maizière, explicó en una conferencia que esta “agresión a la libertad religiosa” por parte del Estado de derecho era “necesaria”.

Las copias del Corán eran distribuidas gratuitamente en la vía pública

Según argumentó, este colectivo (también conocido como Read!), con “centenares de miembros”, difunde una “ideología extremista”, “promueve la radicalización” de jóvenes, apoya organizaciones terroristas, “glorifica la muerte y el terrorismo” y ha enviado a 140 personas a los territorios controlados por el grupo yihadista en Siria e Irak.

La orden de prohibición argumenta que La Religión Verdadera respalda tesis totalitarias, defiende la “yihad armada” y lleva a cabo en toda Alemania acciones de reclutamiento de personas que “por motivaciones islamistas quieren viajar a Siria o a Irak”.

La Policía traslada documentos obtenidos en una redada en una mezquita de Hamburgo

La organización, liderada por radical Ibrahim Abou Nagie, es conocida en Alemania desde hace unos años por repartir el Corán de forma gratuita en zonas peatonales de distintas ciudades.

“Es importante decir que esta prohibición no es una medida general contra la difusión del islam o del Corán. Sino contra el abuso de la religión”, aseguró el ministro, que recalcó que “el islam tiene un sitio seguro” en Alemania. Sin embargo, resaltó que “las traducciones del Corán se distribuyen junto con mensajes de odio e ideologías inconstitucionales”.

Además, De Maiziére subrayó que el gobierno alemán quiere mandar una “clara señal” al salafismo: “No hay sitio en nuestra sociedad” para el extremismo.

El objetivo de la redada, que lleva preparándose un año y en la que han participado cientos de policías, es la incautación de los bienes y los documentos del colectivo, y no tanto practicar detenciones.

Según los servicios secretos alemanes, en el país hay actualmente unos 9.200 islamistas radicales, de los que unos 1.200 son considerados potencialmente violentos y capaces de perpetrar un atentado.

La semana pasada, las autoridades detuvieron a cinco hombres que supuestamente ayudaban al grupo extremista a reclutar miembros en Alemania y proporcionar asistencia financiera y logística. La Inteligencia alemana estima que unas 870 personas (de las que un 20 por ciento son mujeres) han viajado del país a Siria e Irak para unirse al Estado Islámico.