Adiós a Fidel I, el de la República de Cuba
Muerto, porque resulta que era mortal, Fidel I de Cuba, para el siglo y de soltero, Fidel Alejandro Castro Ruz, a los 90 años, tras 57 de reinado, también conocido por El Caballo ¿va a ser sucedido en el trono por Raúl -en primera fila de la línea dinástica y de la otra- con 85 años? ¿Habrá rencillas sucesorias? ¿Votarán los jubilados, los niños de primaria y los jovencitos o tan sólo los alumnos de políticas y sociales? ¿Qué pensará el de la camiseta publicitaria, uno de los consentidos de la Pastor, que no vota monarquía, pero al que le va la gerontocracia hereditaria, que ha instaurado la estirpe de los Castro?
Se le atribuyen, nada menos que 5.775 ejecuciones, 1.234 asesinatos extrajudiciales y 984 homicidios en prisiones., compitiendo en asesinatos con el Che Guevara, de mala memoria. Ahí va eso, la responsabilidad de un total de 7.993 muertes. Como para dejar el cargo en vida. Pura memoria histórica, señor Zapatero. Llegó librando a Cuba de Batista y le hizo bueno, durante 57 años, que se dice pronto, casi dos generaciones arruinadas.
Me temo que lo primero será el cuerpo a tierra –el de los cubanos- por si el demonio imperialista de Trump se plantea invadir el paraíso comunista, aprovechando que ya no está el vigilante nonagenario de la revolución. Me temo que no, porque no le hacen ilusión otros once millones de inmigrantes. Pero será así, se apelará al miedo y eso traerá un quietismo infinito y después, esperemos que gestionen bien el esperpento, por lo de la pobreza energética, vendrá el embalsamiento del comandante, que traído y llevado debidamente, podría dar juego para los próximos cinco años. No mucho más. Que no hagan la tontería que hicieron con Einstein, de sacar su cerebro y pesarlo y hacer comparaciones odiosas. La mejor solución y estímulo, aparte de las luchas intestinas, que se producirán sin duda, para que el pueblo sobreviva y no corra la sangre, puede venir de Miami, de Florida.
No me cabe duda de que en otros cinco años, los que pueda durar el hermano y heredero en el trono tiránico, sosteniendo el espantajo, Cuba va a dar por finiquitado este empeño estéril y anecdótico, que les gustará mucho a la Carmena y a otros dolientes, por lo que tiene de arcaísmo y demostración de un fracaso estrepitoso, que ha arruinado a muchos y que en octubre del año que viene, cumplirá un siglo. Siglo de revolución infructuosa y nefasta que tantas vidas ha amargado y costado, a lo largo y ancho del planeta. Cuba, con el ejemplo de China, Rusia y los que fueron satélites, se irá incorporando al bienestar, mejor o peor, pero con porvenir, seguridad jurídica, respeto a los derechos humanos, inversiones y libertad, odioso capitalismo, que es lo mejor para todos. Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Venezuela, podrán comprobarlo y les va a costar continuar esa carrera que no atrae a nadie, por lo de la gazuza y la carestía de todo y en la que se quedarán solos, expropiándose a sí mismos, porque nadie se pondrá a su alcance. Lo de Corea del Norte, es una patología que no le gusta ni al Monedero, que ya es decir.
El comunismo martiano y marxista leninista, tiránico y totalitario, no tiene porvenir sin Fidel, que sabía vender a sus incondicionales feligreses, semejante mercancía, en discursos de hasta siete horas y cosas así, que hay que valer y a quién sus súbditos, su frustración y su hambre le importaban un rábano.
Habrá que estar atentos a la vil herencia capitalista del finado. Se habla de doscientos millones de dólares, al menos, puestos a salvo, según la revista Forbes, que no es ninguna tontería. Yo, me niego a creerlo y le doy el valor de un infundio. ¿Cómo podría ser esto? Veremos, porque ahí surgirían las bofetadas y la notoriedad del hecho. Son nueve los hijos, más o menos legítimos, atribuidos a este hombre, mujeriego y despiadado. No sería muy coherente con la prédica y podría dar al traste con su prestigio. Mira tu el pobre Múgica, el amigo de nuestra alcaldesa, el de los pies impresentables, inmerso en la pobreza. Lo que sea sonará, pero no se le dará mucha importancia. Seguro. El saldo es lamentable, Cuba no se merecía la agonía que le ha proporcionado el tirano, el farsante y el canalla del Fidel del demonio. Maldito sea para toda la eternidad. No nos toca a nosotros juzgar. Ahora, que Dios se lo demande y que pague por lo que ha hecho. Tiempo y lugar ha tenido.