Otro argentino al servicio de la corte comunista y del catalanismo
Como todos ustedes saben, en la ciudad de Valencia y gracias al Partido Socialista del País Valenciano (PSPV), gobiernan los comunistas y los de Compromis, todos ellos comprometidos con el catalanismo separatista y antiespañol.
Pues bien, desde entonces y para quien no lo sepa, en la tercera capital de España tiene más derecho, un sujeto o sujeta que circule con una bicicleta por las aceras y pasos de cebra poniendo en riesgo la vida de los peatones, sin casco, sin seguro de daños a terceros y responsabilidad civil, y sin pagar ningún tipo de impuesto por utilizar ese medio, que un repartidor autónomo que trabajando como un “cabrón” diez horas diarias suministrando productos por el centro de la ciudad, tiene que hacer frente al acoso de una Policía Local a las órdenes de un “ecologista” italiano (Giuseppe Grezzi) que está como un cencerro y que es concejal, empeñado en trasladarnos con sus políticas al candil y a la vela.
Ese sufrido repartidor y contribuyente, machacado a multas por la Policía Local, con muchas dificultades para estacionar su vehículo y desempeñar su trabajo, a diferencia que el ciclista irresponsable protegido por Grezzi, tiene además que satisfacer, sin excusa ni pretexto, todos los impuestos que gravan su vehículo a motor; tiene que tener el seguro del vehículo en vigor y al corriente de pago; debe pasar las ITV,s correspondientes para que no le inmovilicen su herramienta de trabajo; debe abonar el IVA mensualmente; y debe presentar la declaración del IRPF para evitar el embargo inmediato. Y todo ello, para que con el fruto de su sudor, de su trabajo y de sus impuestos, puedan seguir parasitando en el presupuesto público toda esta patulea infecta de extrema izquierda instalada en el Ayuntamiento.
Comunistas y comprometidos con el catalanismo separatista, están haciendo de Valencia una ciudad dormitorio y de acogida, pero, no para turistas civilizados que saben comportarse y que vienen a dejarse el dinero ocupando hoteles, comiendo en restaurantes y comprando en comercios de nuestros barrios, no. Los actuales regidores están diseñando la ciudad para un turismo de mochileros en bicicleta, enemistados con el champú y el jabón; turistas de bocadillo en parques y jardines; de botellón y porros compartidos, y con derecho a todo tipo de servicios a costa del bolsillo de los sufridos contribuyentes valencianos.
La decisión, más tarde rectificada en parte, del alcalde marxista de Valencia prohibiendo que las campanas doblen o repiquen en la iglesia de San Nicolás, ha sido consecuencia de la queja de un simpatizante de “Compromís” que, según ha trascendido, responde al nombre de Rubén Héctor Juan Peiró, personaje que refleja en su perfil en una red social, que llegó a pedir el voto para el partido de Mónica Oltra en las elecciones municipales y autonómicas de 2015.
Pues bien, lo que la prensa omite -como siempre que no se trate de un español-, es que este tipejo es otro argentino natural de Buenos Aires, que llegó a España como la monja Lucía Caram, Echenique o Pissarello, no precisamente para ponerse al servicio del bien común y vertebrar España con un trabajo digno y honrado, sino para ponerse al servicio del marxismo, del catalanismo más sectario y estridente, de los amigos de la ETA, y para vivir a rebufo de la política, que a su vez, se nutre única y exclusivamente, del trabajo, del sudor, del esfuerzo y del sacrificio, de los contribuyentes españoles.
No es el sonido de las campanas lo que molesta a este argentino, lo que le molesta a este despreciable sujeto es la Iglesia; es la Valencia de la Semana Santa Marinera; es la Valencia que venera a su Patrona la Virgen de los Desamparados, y es la Valencia que canta en su himno para ofrendar nuevas glorias a España. Todo esto es lo que molesta, no solo a este argentino, sino a todos aquellos de quienes recibe directrices e instrucciones.
La democracia en España es un instrumento para los profesionales de los partidos políticos, que saben aprovechar muy bien las minorías tanto de izquierda como de extrema izquierda, para poder gobernar aunque no ganen las elecciones. Los acomplejados peperos lo saben, pero les da igual. Una vez han probado el dulce sabor de la nómina de seis mil euros mensuales, así como las prebendas y privilegios que les procura la democracia, prefieren tragarse el sapo al ver que un separatista o podemita antiespañol pueda llegar a la poltrona a través del pacto y del pasteleo sin haber obtenido la victoria en las urnas, antes que poner en peligro sus sillones por denunciar, no solo ésta felonía, sino la grave situación de nuestra Patria bajo un régimen partitocrático, que se empeña en mantener vivos a diecisiete vampiros insaciables.
por donde pasen los comunistas, la mierda la violencia y la ruina estan garantizadas . y en valencia con el pacto de perdedores con el pesoe que son igual de hispanofobicos y pancatalanistas que los comunistas , pues han colocado un catalan de alcalde como si hubiesen puesto una pica en flandes. y asi el del peluquin se pone de presidente , controlado por la alemana-catalanista , y claro como esto es el frente popular tan querido por estos individuos pues se traen las brigadas internacionales – ejercito de stalin – pisarelos mingasdomingas caranbas giusepes indios y rubenhectorsjuanes para recrear… Leer más »
El hindú,que no sabe español,separatista,,y ahora éste zángano.Progresamos adecuadamente.
Artículo para difundir en todos los medios. Sobre todo en las TV. Cajas estúpidas evidentemente diseñadas a conciencia para cumplir su labor de estupidización. Diría que causa estupor ver como es posible que esta gente y estos partidos perroflaúticos medran en una sociedad supuestamente civilizada y educada con unos ciertos niveles de cultura y valores. Pero mentiría. No me causa estupor alguno ver que esta patulea triunfa teniendo en cuenta que las opciones son cuanto menos vomitivas. Éstos, los rojos, al menos no engañan a nadie. Los votas a sabiendas de que votas odio a España, odio a Cristo, y… Leer más »