A. Anglin/Daily Stormer.- La historia de la evolución humana ha sido reescrita después de que los científicos descubrieran que Europa fue el lugar de nacimiento de la humanidad, no África.

Actualmente, la mayoría de los expertos creen que nuestro linaje humano se separó de los simios hace aproximadamente siete millones de años, en África central, donde los homínidos permanecieron cinco millones de años antes de aventurarse más lejos.

Dos fósiles de una criatura similar a un simio, con dientes humanos, han sido hallados en Bulgaria y Grecia. Los expertos creen que datan de hace 7,2 millones de años.

El descubrimiento de la criatura, llamada Graecopithecus freybergi, y apodado “El Graeco” por los científicos, demuestra que nuestros antepasados ??ya estaban empezando a evolucionar en Europa 200.000 años antes del primer homínido africano.

Un equipo internacional de investigadores dice que los hallazgos cambian completamente el inicio de la historia humana y sitúan al último antepasado común de los chimpancés y los humanos -el denominado Enlace Desaparecido- en la región mediterránea.

En ese momento, el cambio climático había convertido a Europa Oriental en una sabana abierta, lo que obligó a los monos a encontrar nuevas fuentes de alimentos, provocando un cambio hacia el bipedismo, creen los investigadores.

“Este estudio cambia las ideas relacionadas con el conocimiento sobre el tiempo y el lugar de los primeros pasos de la humanidad”, dijo el profesor Nikolai Spassov, de la Academia de Ciencias de Bulgaria.

Graecopithecus no es un simio. Es miembro de la tribu de los homínidos y el antepasado directo del homo.

Spassov señaló que “la comida del Graecopithecus estaba relacionada con la vegetación seca y dura de la sabana, a diferencia de los grandes simios recientes que vivían en los bosques”, por lo que, “como los seres humanos, tiene molares anchos y esmalte grueso”.

“Hasta cierto punto esto es un eslabón perdido recientemente descubierto. Pero los eslabones perdidos siempre existirán, porque la evolución es cadena infinita de formas posteriores. Probablemente el rostro de El Graeco se parezca a un gran simio, con caninos más cortos”, añadió.

El equipo analizó los dos especímenes de Graecopithecus freybergi: una mandíbula inferior de Grecia y un diente premolar superior de Bulgaria.

La mandíbula inferior, tiene raíces dentales adicionales características, lo que sugiere que la especie era un homínido.

También se encontró que la especie era varios cientos de miles de años mayor que el homínido africano más antiguo, Sahelanthropus tchadensis, que se encontró en Chad.

“Nos sorprendieron nuestros resultados, ya que los prehumanos sólo eran conocidos en África subsahariana”, dijo Jochen Fuss, un estudiante en Tübingen que realizó esta parte del estudio.

El profesor David Begun, paleoantropólogo de la Universidad de Toronto y coautor del estudio, añadió: “Esta datación nos permite mover la división entre humanos y chimpancés en el área mediterránea”.

Durante el período, el mar Mediterráneo pasó por períodos frecuentes de secado, formando un puente terrestre entre Europa y África y permitiendo que los simios y los primeros homínidos pasaran entre los continentes.

El profesor Böhme agregó:”Nuestros resultados pueden cambiar nuestras ideas sobre el origen de la humanidad. Yo personalmente no creo que los descendientes de Graecopithecus muriesen, pudieron haberse extendido a África más tarde. La división de chimpancés y humanos fue un evento único. Nuestros datos apoyan la opinión de que esta división estaba ocurriendo en el Mediterráneo oriental – no en África”.

“Si se acepta, esta teoría alteraría de hecho el inicio mismo de la historia humana”.

La investigación fue publicada en la revista PLOS One.

La teoría sobre el nacimiento de la humanidad en África fue siempre una teoría politizada y que fue apoyada no por la evidencia, sino por la falta de ella.

El objetivo ideológico era afirmar que básicamente los blancos son sólo negros con la piel más clara porque durante la Edad de Hielo llevaban más ropa y también porque consumían más vitamina D.

Por lo tanto, el razonamiento detrás de la teoría es que todos estamos muy cerca, genéticamente hablando, por lo que no habría ningún problema con las mezclas raciales. O dicho de otra forma, que la raza es sólo una construcción social.

Mucho dañó ha hecho a la investigación evolutiva los argumentos del judío Stephen Jay Gould a favor de la rápida evolución y también por argumentar, en el campo de la sociobiología, que la evolución no tiene ningún papel en el comportamiento humano.

Con este nuevo descubrimiento de prehumanos en Europa, se está fechando el fósil europeo como el más antiguo, pero básicamente terminaremos con las mismas conclusiones con respecto a la rápida evolución y, por lo tanto, con la no existencia de razas. Así que no veo motivos para que se alegren los defensores de las diferencias antropológicas.