E. Uriarte.- Pedro Sánchez ha dicho en el Congreso del PSOE exactamente lo mismo que dijo tras las elecciones de 2015 y tras las de 2016, pero repentinamente todos se han alarmado, hasta la propia izquierda, la moderada, por supuesto. Ahora tienen miedo a Sánchez, a su proyecto radical con la extrema izquierda y los nacionalistas y a su “España plurinacional”.

Basta repasar los periódicos de hoy, y no sólo El País. Cierto que El País critica a Sánchez desde hace meses, que apostó por Susana Díaz, pero también que sostuvo lo que consideraba entonces una “legítima” pretensión de impedir el Gobierno del ganador de las elecciones. O que no ha parado de justificar la “legitimidad” del independentismo con las constantes críticas a la “falta de diálogo del Gobierno”.

Y como El País, muchos otros. Antes daban argumentos para “la alternativa de cambio” de Sánchez, ahora tienen miedo a Sánchez. Pero este Sánchez es el mismo de antes. Y si ha llegado a donde está es porque muchos de los que ahora se alarman lo sostuvieron, lo justificaron o callaron, comenzando por la propia Susana Díaz, derrotada por su propio miedo y falta de liderazgo.