Los países con mas asesinatos son los más “multiculturales”: Brasil, el peor ejemplo de hacia dónde se encamina Europa
DS.- Desde su pupitre, Renan, de 13 años, no consigue enumerar más de tres países sin trabarse –“Brasil, eh… Argentina, México, ehhh….”–, pero recita de carrerilla nueve tipos de armas: “Snipe, Ak-47, 7.65, AR-15, Bazuca, calibre .50, calibre 12, Glock, ametralladora giratoria…” En la clase de al lado, Guilherme, de 14 años, es capaz además de imitar el sonido de los tiros: la ráfaga interrumpida del AK-47, el eco seco de la pistola, el estruendo de un lanza granadas. “Es lo que oímos todos los días”, se justifican.
Los dos, chicos negros y pobres, son alumnos de una escuela municipal de Río de Janeiro enclavada en un complejo de favelas dividido por un río fétido, una línea de tren y la guerra entre tres facciones de narcotraficantes, a 36 kilómetros del Cristo Redentor.
Decenas de miles de niños en Río estudian en colegios en áreas de conflicto, dominadas por los narcos y sometidas a las frecuentes incursiones de la policía. Son barrios en guerra. Hay tiroteos casi diarios, muertos, balas perdidas y los chavales crecen aprendiendo protocolos para sobrevivir, en casa, pero también en clase. La crisis económica que atraviesa Río ha recrudecido casi todos los índices de violencia, la policía sufre con falta de recursos y el narcotráfico ha intensificado sus actividades criminales y sus disputas.
El cole ya no es un lugar seguro. En los primeros 82 días lectivos de 2017, solo hubo siete días de paz en los que ninguna de las más de 1.500 escuelas municipales tuvo que cerrar sus puertas, fueron casi 120.000 niños sin cole.
Cuando el fuego cruzado sorprende a los pequeños en clase los profesores ya saben qué hacer. Todos corren hacia los pasillos y se tumban en el suelo esperando que vuelva el silencio. Fue lo que ocurrió el pasado 31 de marzo en la escuela de Renan y Guilherme cuando la policía irrumpió en la calle del colegio en pleno horario escolar.
Dos traficantes fueron abatidos y después ejecutados frente al muro de la escuela y Maria Eduarda, de 13 años, que estaba en clase de educación física en el patio, no tuvo tiempo de esconderse. Varios tiros de fusil la alcanzaron mientras bebía agua y, por lo menos, uno de ellos partió del arma de un policía. “Murió delante de todos. Acababa de decirnos cuánto nos amaba. Es inhumano”, solloza Fabio, de 15 años, amigo de Maria Eduarda.
El muro del colegio, con más de 20 perforaciones de fusil, era la imagen de la barbarie. Tras casi un mes sin clase, dedicado a la atención psicológica de alumnos y profesores, la escuela volvió a su rutina y, además de recuperar el contenido atrasado, intenta borrar las marcas de la tragedia. El muro ya no es blanco y las marcas de la pericia policial que rodeó con rotulador cada impacto de tiro se han sustituido por un mural de un cielo azul en el que vuelan pájaros y peces de colores, crecen plantas y un electrocardiograma con 23 corazones intercalados recorre la pared. Uno por cada bala. Al doblar la esquina, sin embargo, sigue ahí un punto de venta de drogas protegido por adolescentes con fusiles al hombro y si se pregunta en una de las salas de aula cuántos ya han perdido un familiar por culpa de la violencia, 17 de 22 alumnos levantarán la mano.
La subdirectora de un colegio con las paredes, pizarras y puertas llenas de balazos, guarda en una bolsa de supermercado todos los casquillos encontrados en la escuela en el último año. “Gasto más en sustituir los cristales de las ventanas que en material didáctico”, lamenta y pide que ni ella ni la escuela sean identificadas por miedo a represalias. El colegio, con cerca de 500 niños de cinco a 14 años, es uno de las que se encuentran en la llamada Franja de Gaza, una calle estrecha que divide los dominios de dos facciones criminales en el complejo de favelas de Maré, ocupado temporalmente por las Fuerzas Armadas en las vísperas del Mundial de 2014. Ese territorio se disputa a tiros y los colegios, que sirven de trinchera, se desangran. “Perdemos alumnos que se pasan al narcotráfico, a otros los matan, otros se mudan con sus familias a un lugar más tranquilo y otros tienen que abandonar porque viven dos calles más allá y la facción rival no les permite atravesar”, lamenta la subdirectora.
Se trata de una información recogida del diario El País. No cabe la menor duda, Brasil es un paraíso de igualdad y diversidad. Y es exactamente lo que necesitamos en Europa, que nuestros jóvenes estudien al mismo tiempo que esquivan balas volando sobre sus cabezas. Después de todo es bueno para la economía, y arreglará el problema de la baja natalidad.
Los países con mayores índices de asesinato son precisamente los más “multiculturales”. Esto no es una opinión, son los hechos. No necesitamos viajar al futuro para saber a dónde se dirige Europa por la senda de la “diversidad”, el “multiculturalismo”, y otros eufemismos que camuflan el verdadero objetivo: el genocidio de la población de raza blanca. Los europeos no tenemos nada que ganar con el multiculturalismo. Los únicos que pueden beneficiarse de una mayoría desorganizada, dividida, enfrentada y sin identidad son las minorías organizadas, unidas y conscientes de su identidad racial.
Dejad que entren, cuantos mas mejor, al final Europa sera una cloaca
Es que no falla: a mayor cantidad de negros o mulatos, mayor cantidad de delitos y actos brutales de todo tipo; Se ha convertido ya en un axioma irrebatible, algo que conocian perfectamente nuestros antepasados. Hasta gente que negaba esto hace unos años esta dandose cuenta de que es asi. Estan consiguiendo el efecto contrario al que buscaban, o eso nos decian, porque yo creo sin ninguna duda que todo esto es premeditado. Se busca el desblanqueamiento del planeta a toda costa y su sustitucion por gente mucho mas faciles de manejar que los blancos.
Excelente articulo.
Un dato:en España el 70% de la poblacion reclusa son extranjeros.
Sólo pueden vivir con los blancos si no se les otorgan unos derechos que NO se han ganado.
Conque tengan los derechos básicos sería suficiente.
He dicho la verdad.
Joeerr con los cortes, me pasé ¿no? ja ja.
Nota del administrador: Usted sabe que sí. Con “amigos” como usted, no necesitamos buscarnos nuevos enemigos.
BRASIL YA ES UN PAIS DE NEGROS Y MULATOS COMO CUBA PERO POCOS SE ACUERDAN DE LA CUBA DE LOS AÑOS 40 Y 50,LA ANTIGUA CUBA LA POBLACION BLANCA ERA DEL 90%,AHORA LOS BLANCOS EN LA CUBA COMUNISTA SON EL 36%.
los que pasan por blancos y la mayoria de esos son viejos y no se procrearan,la venganza de los escogidos por haber votado en la onu,contra la creaZION del estado de israel,cuba fue uno de los pokisimos que se opuso a esa monstruosidad!
La mayoría de población de Brasil está en el sur y en la costa, desde Belem hasta Sao Paulo, y la mayoría de blancos viven en esas zonas. El resto, mulatos e indígenas viven en el centro o sea todo el Amazonas hasta Venezuela. Deja de decir perradas, sabemos que Pedro Varela y David Duke te pagan por ello.
Europa no tendra tanta suerte, el Islam sometera todo y no habra ni enfrentamientos ni nada, solo sumision.
El hilo de la historia no es lineal. Cada cierto tiempo hay una revolución salvaje. Ya toca!
En brasil,los blancos ya son minoria,para alla vamos los europeos en pocos años mas.
¿Cuando fueron mayoría los blancos en Brasil?
Hay mas blancos que negros en Brasil, sobre todo en el sur. Solo faltaba que habría más blancos siendo un país indígnena!
Completamente de acuerdo, que expulsen al malvado hombre blanco, se viene a Europa con su gente y contemplamos como la inevitable transición de Brasil a sima tercermundista se completa en 10 años en vez de en 50.
Según los últimos censos, en Brasil la ,pob. de origen afro alcanza más o menos el 51%; los “blancos” están concentrados en los Estados del sur; son descendientes de inmigrantes llegados cuando el Brasil tuvo que abolir la esclavitud (1888) y necesitaba “manos” para hacer el trabajo hecho anteriormente por los esclavos.
Magistral articulo..