Méndez de Vigo afirma que se garantizará el derecho al español en los centros escolares de Cataluña
El ministro de Educación y portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha asegurado que el Gobierno garantizará “la libertad de los padres” para elegir el castellano como lengua vehicular de sus hijos en los centros escolares catalanes.
“El cómo lo hagamos, lo estamos estudiando” pero “sin duda lo haremos”, ha aseverado el ministro, quien ha explicado que durante estos años el Ejecutivo “no ha estado de acuerdo” en cómo se llevaba a cabo la garantía de poder estudiar en castellano como lengua vehicular en Cataluña.
Lo ha declarado tras el Consejo de Ministros y después de que ayer se conociera que el Ejecutivo estudia la posibilidad de que en la matriculación del próximo curso escolar en Cataluña se incluya una casilla en la que los padres puedan elegir el castellano como lengua vehicular de sus hijos, tras la petición hecha al respecto por el sindicato de profesores AMES y Sociedad Civil Catalana (SCC).
Todo ello en aplicación del artículo 155 por el que el Ministerio tiene las competencias de la Consejería de Educación catalana.
No obstante, el ministro no ha querido hablar de “casillas” y ha insistido en decir que se está estudiando la fórmula para garantizar la lengua en la que quieren escolarizar a sus hijos los padres.
“No me he pronunciado por ningún modelo concreto porque estamos estudiándolo”, ha reconocido el ministro aunque sabe que “algunos han dicho esto o lo otro”.
“Se trata de una cuestión técnica” y lo vamos a hacer “de la mejor manera que sepamos”, combinando el derecho de los padres y el correcto funcionamiento del sistema educativo catalán.
“No es un globosonda”, ha contestado Méndez de Vigo a preguntas de los periodistas, sino “aprobar una resolución que toca tomarla” porque en febrero y marzo es cuando se hacen las preinscripciones para el curso próximo.
“No es un cambio de modelo educativo que solo se puede hacer por cambio ley y eso solo lo puede hacer el parlamento de Cataluña”, ha añadido.
Pero ha comentado que ahora se trata de “adecuar” la aplicación de las sentencias del Tribunal Constitucional, del Supremo y del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, este última en cuanto a que se debía dar un mínimo del 25 % de las clases en castellano.
Hay que tener muy, pero que muy poca vergüenza para decir: “que durante estos años el Ejecutivo “no ha estado de acuerdo” en cómo se llevaba a cabo la garantía de poder estudiar en castellano como lengua vehicular en Cataluña”.
Ni esforzandose Sr ministro se puede hacer peor, pero lo peor es que aun encima nos tome por gilipollas..
Estos cobardes y nauseabundo Pperros buscan excusas pueriles para justificar la aplicación light del art.155. Y ningún plumilla apesebrado juntaletras les recuerda que cuando tenían mayoría absoluta no hicieron nada de nada. Incluso siguieron permitiendo y financiando el adoctrinamiento en esos medios catalufos. La credibilidad de estos canallas hace mucho tiempo que se extinguió. ¡ Pero qué clase de gentuza, por Dios!!! A estos malnacidos de todos los partiduchos repletos de arribistas y ladrones habría que decirles que lo que atenta contra el progreso y el futuro de España,es que tengámos que sostener y mantener un Estado fallido,por haber colocado… Leer más »
Ya en 1983, cuando se aprobó la primera ley de imposición del catalán en la enseñanza, el PP (AP en aquel momento) votó a favor de la misma.
Todos los partidos, CiU, ERC, PSUC, PSC, UCD, PP y PA (¡Partido Andalucista!) votaron a favor. El único que fue relativamente coherente pero se quedó con una simple abstención, a pesar de haber votado a favor de la mayoría de artículos, fue Don Juan Besa de la UCD.
Llevan veinte años diciendo lo mismo cuando bajan en intención de voto. A la hora de la verdad se ríen y traicionan a Galicia bilingüe o a los que piden poder educarse en español pactando con los separatistas.
Quien no conozca a estos peperos asquerosos, que les compre.
¿Mendez de Vigo? como todos los demás: bla, bla, bla, bla…
Manda huevos con estos piperos, los que nos meten pipas, y es que no tienen remedio. Ni los “ciudadanos “ españoles.