Los animales se hacen nocturnos para evitar a los humanos
EC.- ¿Sabes ese momento en el que decides que vas a salir de casa diez minutos antes todos los días para evitar al vecino pesado del segundo? Pues los animales han decidido hacer algo similar, más radical, obviamente, para evitarnos a nosotros. Un nuevo estudio demuestra que los mamíferos que conviven con el ser humano se están convirtiendo cada vez más a la vida nocturna con un objetivo claro: no cruzarse con el mayor depredador del planeta.
Investigadores de la Universidad de California-Berkeley (Estados Unidos) y de la Universidad Estatal de Boise (Estados Unidos) acaban de publicar un estudio en la revista Science en el que demuestran que muchos mamíferos han cambiado sus hábitos y sus horarios por la acción humana. Una conclusión a la que han llegado después de analizar 76 informes sobre cómo 62 especies de mamíferos de los seis continentes (entre ellos el zorro en Castilla-La Mancha) se mueven por el mundo. Informaciones que mostraban que desde las zarigüeyas hasta los elefantes cambiaron sus comportamientos en respuesta a acciones humanas como la caza, la agricultura o el desarrollo urbanístico.
Los estudios, realizados con todo tipo de herramientas de rastreo (balizas, collares con emisores de radio, GPS, fototrampas…), mostraban cómo, de forma clara, los animales investigados se volvían más activos cuando caía la noche, mucho más activos que cuando los humanos no estaban en su hábitat natural. Tanto es así, que los mamiferos que repartían su actividad diaria al 50% entre el día y la noche aumentaron su movimiento en el abrigo de la noche hasta el 68%.
Lo más llamativo, y alarmante, según los investigadores, es que esta transformación ocurre independientemente de cómo sea la actividad humana que perturba al animal. Es decir, no está relacionado directamente con la pura supervivencia, sino que la mera presencia del hombre ha hecho que los animales hayan cambiado sus horarios.
“Al caminar por el bosque, podemos pensar que no dejamos huella, pero nuestra sola presencia puede tener consecuencias duraderas”, explica Kaitlyn M. Gaynor, una de las autoras de la investigación. “Por ejemplo, hemos detectado que hubo una fuerte respuesta al desarrollo urbano por parte de los animales pues esta actividad realmente supone una gran transformación del paisaje, pero también hemos visto que hubo cambios similares en respuesta al desarrollo de las actividades recreativas”.
De momento, no se conocen las consecuencias que puede tener este cambio aunque los investigadores se apuntan varias ideas. Hablan de peligros como que el animal sea menos efectivo a la hora de cazar y alimentarse en la oscuridad o tenga más dificil el procrear, pero también de que puede ser algo positivo para la convivencia en La Tierra. Lo que queda claro también es la influencia del hombre en todos los aspectos de la naturaleza.
Hasta los animales nos reprueban….