Mientras la viuda de un guardia civil asesinado en acto de servicio no tiene derecho a una pensión…
Escribí hace unos días sobre la Ley y la Justicia. Era una reflexión que quise compartir con todos ustedes a raíz de la injusticia que suponía para la viuda de un guardia civil asesinado en la provincia de Teruel, a quien la Ley le niega una pensión a pesar de que su marido había sido acribillado a balazos en acto de Servicio junto a otro compañero, y a José Luis Iranzo, un honrado, noble y valiente trabajador aragonés:
Pues bien, cuando la impotencia todavía me embarga por algo tan sumamente arbitrario, injusto e inaceptable, los medios nos obsequian con una de esas noticias que, con lo que está cayendo, solo provocan la nausea y el vómito: el Consejo de Ministros condecora con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica al expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, y al que fuera su ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro. Y, con la Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III, a la que fuera vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y a los ministros Alfonso Dastis, Rafael Catalá, Mª Dolores de Cospedal, Juan Ignacio Zoido, Íñigo de la Serna, Íñigo Méndez de Vigo, Fátima Báñez, Álvaro Nadal, Isabel García Tejerina, Román Escolano y Dolors Montserrat.
Si resulta que la “Orden de Isabel la Católica” tiene por objeto, premiar aquellos comportamientos extraordinarios realizados por personas españolas y extranjeras que redunden en beneficio de la Nación (…), ¿cómo es posible que estás mismas distinciones las concediese también Mariano Rajoy al Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, que dejó España como un auténtico solar en lo económico, una Babel en lo político, y en lo social alcanzó el record de CINCO MILLONES de desempleados?
Pues sencillamente porque nuestra democracia ha sido siempre un corta y pega del bipartidismo. Lo que sucede, es que ahora para mayor escarnio, aparece un indocto e iletrado como Pedro Sánchez, y dice que España ha entrado en una “nueva época”. Claro, los necios vestidos de presidentes, los incapaces convertidos en ministros, los terroristas en hombres de paz, los independentistas en consejeros de Presidencia, la Monarquía se ha quedado sin Corona, la Magistratura sin Justicia, la Iglesia sin Dios, el Ejército sin Patria, y, los trabajadores y cotizantes españoles, han quedado reducidos a mendigos claudicantes mientras los ilegales perciben sin haber cotizado, todas las prestaciones sociales que se han inventado hasta la fecha, y acaparan la totalidad de los servicios públicos.
Una muestra más de que la política es una farsa puesta en escena; un teatro donde la democracia es su obra; los políticos, los títeres; los órganos del Estado, sus instrumentos; la televisión su medio más venenoso y criminal; la banca, quien da cuerda a los instrumentos; el rey, el convidado de piedra; y el pueblo, una manada de borregos sin memoria que cada cuatro años corre a votar para dar legitimidad a los que después le chupan la sangre y “lo muelen a palos”.
Por desgracia tiene usted toda la razón y no solo eso, sino que también como demuestran día tras día consejeros y ministros que se suben entre un 20% y 30% los sueldos, el chalet del coleta mugrosa y la chupa y cabalga puestos… Y mientras como dice, desaparece la clase media que tanto costó crear al que tanto critican y quieren profanar su paz eterna. Por suerte la historia española demuestra que muchas veces su población duerme en todos los sentidos, unos pocos patriotas que valen por varios hombres cada uno de ellos, luchan y dan su vida por la… Leer más »
Señor Román, usted siempre con la demagogia como punta de lanza, feliz verano.