La base mínima de los autónomos subirá un 12,5% el año próximo tras el alza del salario mínimo
La subida del salario mínimo interprofesional hasta los 900 euros al mes el próximo año, no solo se salta el diálogo social, también repercutirá al alza en lo que pagan el 85% de los autónomos a la Seguridad Social, la base mínima, dado que ambos indicadores están referenciados. Esta base mínima de cotización de estos trabajadores escalará casi un 13%, hasta los 12.600 euros al año. Esto supondrá que en lugar de cotizar por 932,79 euros al mes, el trabajador pase a cotizar 1.050 euros al mes; su cuota de cotización también pasará de 312,9 euros al mes desde los 277,9 euros. Es decir, pagarán 420 más cada año.
En un momento en el que la factura de las pensiones se ha desbordado, el alza impositiva supondrá una inyección liquidez para el sistema. El presidente de ATA, Lorenzo Amor estima que esa subida del 13% en solo un ejercicio supondrá 800 euros más de recaudación para la Seguridad Social, mil millones si se tiene en cuenta a los autónomos societarios. Los autónomos aportan a la Seguridad Social 11.000 millones de euros. Tras la subida sus aportaciones crecerán por encima de los 12.000 millones.
La subida será efectiva desde el 1 de enero, aunque la idea del Gobierno es a lo largo del ejercicio adecuar la cotización que pagan los autónomos a los ingresos que perciben. La medida, por el momento, queda en el aire.
En mi zona se abre una tienda y se cierran dos, sin embargo los chinos aguantan porque dicen que tienen un alta de autónomo y trabajan siete en la tienda, incluso a mediodía están al frente sus hijos estudiantes. Si les suben las cuotas a SS vendrán cierres y más letreros de se alquila o vende. En mi zona los valores catastrales a veces superan el valor real y hacen liquidaciones de ese reajuste con tres y cinco años hacia atrás, en fin vamos en retroceso.
Que bien, como no vamos suficientemente ahogados los autónomos, que nos suban todo un poquito más.
Habría que implantar un sistema de autónomos que imitara al británico, donde uno presenta una declaración de bienes previa, y a partir de ahí se limita a tributar por la diferencia entre gastos y beneficios. Nos evitaríamos muchos autónomos en negro, y sin duda sería mucho más justo.