España conquista el Mundial Sub’17 de fútbol femenino tras vencer a México en la final
De Uruguay al cielo, España es campeona del mundo. La Rojita, en su versión Sub’17 -generación con futbolistas nacidas entre el 2001 y 2003-, se coronó en el estadio Charrúa de Montevideo al vencer a México en la final. Toña Is consiguió en dos semanas que nos aprendiéramos de memoria el once tipo de la selección española, un grupo al que puede alabarse lo bien que juega, cómo trata al balón y la calidad que atesora nombre por nombre, pero sobre todo ejemplificar la definición de palabra equipo.
No fallaron a sus principios el día de la final. Marcaron los tiempos desde el pitido inicial mimando el balón y jugando en campo contrario. Sintiéndose grandes, confiando en sus prestaciones, disfrutando. Sólo tardaron un cuarto de hora en abrir la lata. Un pase en largo de Pecas fue acomodado con la testa por Salma con destino Pina. Claudia bajó el balón con la diestra, se acomodó para disparar con la zurda y batió por bajo a Jaidy con un disparo cruzado.
La jugadora del Barcelona fue derribada dentro del área claramente por una defensa azteca, pero la trencilla obvió un penalti muy claro. No le importó, estaba de dulce. Minutos después aprovechó un tiralíneas de Eva Navarro hasta línea de fondo para mandar el balón al fondo de la jaula.
Uno de los pocos males achacables a España en este campeonato fue desconectar tras anotar. Volvió a pasar en la final. 180 segundos después del gol de Pina, México recortó distancias. Fue un saque de esquina rematado con la testa por Castro y rebotado con mala suerte en el cuerpo de Eva Alonso antes de meterse en la portería defendida por Coll. A pesar de tener que templar los nervios y ver alguna indecisión en defensa, antes del descanso España rozó el tercero con las botas de Eva Narro, Pina e Irene. ¡Qué tridente!
El segundo acto trajo consigo la permuta de bandas de Salma y Eva Navarro así como la pérdida de metros en favor de una México aguerrida y peleona. El ritmo decayó y se hizo largo el fin de fiesta. España también ganó el duelo del otro fútbol. El de sufrir cuando la cuesta se empina demasiado, el de sobrevivir al asedio rival a la desesperada, al de mantener la cabeza fría hasta el pitido final.
El partido se consumió bajo la atenta mirada de Gianni Infantino, presidente de la FIFA; Jorge Vilda, director técnico de la RFEF; Pedro Bordaberry, presidente de la Federación Uruguaya de fútbol y frente a los millones de telespectadores que no perdieron ripio de lo acontecido en la finalísima. España sube a lo más alto del podio por primera vez en su historia en lo que a un Mundial se refiere, un Olimpo reservado a leyendas del balón que ya tiene a 21 nuevas inquilinas. Enhorabuena.
Que diferencia de fisico entre las españolas y las mexicanas, mientras las primeras son altas y esbeltas, las segundas se veian bajitas con el tronco del cuerpo muy grande en comparacion a sus extremidades cortas,lo que las hace ver gordas con esas espaldas tan anchas, ademas parecen carecer de cuello como si su cabeza naciera de entre sus hombros.
Muy cierto hombre la fisionomia Europea pura es la mejor viva España