La candidata de Vox a la Alcaldía de Marbella, junto a la fachada del club de alterne Milady Palace.

El legendario prostíbulo de lujo Milady Palace no sólo es célebre por su vinculación con la actual cabeza de lista de Vox en Marbella, Rosa María Calvente. Según su currículum oficial, la candidata a la Alcaldía trabajó durante seis años como “encargada” y jefa de personal la sociedad Suncres Costa SL, cuya única actividad es la gestión de este establecimiento.

Pero hace ya varios años, el conocido club de citas de Marbella estuvo en el centro de la polémica que se cobró la cabeza del alcalde y senador socialista Luis Moreno Castro, después de que la Justicia constatara que sus cargos de máxima confianza en el Ayuntamiento de Baena (Córdoba) pedían facturas falsas a varios proveedores del Consistorio para irse de fiesta al Milady Palace de Marbella.

Unas escuchas telefónicas practicadas por la Policía Judicial en 2007 destaparon el escándalo y llevaron al banquillo al secretario personal del alcalde socialista, Rafael Santano, y a otro cargo de confianza del Ayuntamiento, Juan Díaz Pérez. El proceso judicial se prolongó hasta 2016, cuando los dos imputados alcanzaron un pacto con la Fiscalía para reducir sus penas, de seis años a tan sólo seis meses de prisión, tras asumir su culpabilidad en un delito continuado de estafa y otro de falsificación de documento mercantil.

Una de las conversaciones intervenidas puso de manifiesto la mecánica que Rafael Santano utilizaba para sustraer el dinero público y gastárselo en el célebre puticlub de Marbella. Santano se dirigió a uno de los contratistas del Ayuntamiento de Baena para darle las siguientes instrucciones: “Me tienes que hacer dos facturas… Una e 550 euros IVA incluido, y otra de 1.100 con el IVA incluido… Pones gastos de diversas actividades protocolarias o de protocolo; y en la otra pones regalos celebración… Actividades Virgen de los Desamparados… Me las subes mañana con la otra”.

“¡La brasileña alta que está muuuy buena!”

De este modo, el asesor del alcalde socialista utilizaba como tapadera una asociación de vecinos dedicada a la caridad, para justificar gastos ficticios ante el Consistorio. La cantidad defraudada con este método alcanzó los 37.434 euros, según la investigación judicial.

Rafael Santano y su compañero en el Consistorio eligieron precisamente el puticlub Milady Palace de Marbella para gastarse, en varias fiestas, el dinero del que se habían apropiado ilegalmente. En otra conversación grabada, su compañero de correrías, el alto cargo municipal Juan Díaz Pérez, anunciaba su llegada al Milady Palace y pedía que le atendiera “una brasileña, una alta que estaba, que está muuuy buena”.

La investigación judicial avanzó gracias a la confesión de una empresario que, ante la Guardia Civil, reconoció haber fabricado facturas falsas por encargo de Rafael Santano. El empresario aportó a los investigadores abundante documentación, pero luego se retractó cuando quedó imputado en la causa.

Cuando estalló el escándalo, el senador y alcalde socialista Luis Moreno Castro puso “la mano en el fuego” por sus dos asesores que se gastaban el dinero público en el puticlub de Marbella. Nunca fue imputado, aunque de algunas de las conversaciones podía desprenderse que estaba al corriente de los manejos de sus cargos de confianza.

“¡Habremos hecho cosas peores!”

En uno de los pinchazos, el alcalde reprochó a su secretario personal que las cuentas de la partida municipal de protocolo –a la que se cargaban las facturas falsas– resultaban “infumables”. La respuesta de Rafael Santano denotaba una enorme complicidad entre ambos: “”No voy a hacer yo algo que nos pillen por un viaje. ¡Habremos hecho cosas peores que ésa!”. Con todo, el escándalo le costó el cargo a Luis Moreno, al que el PSOE impidió repetir como candidato al Senado por Córdoba.

La candidata de Vox a la Alcaldía de Marbella, Rosa María Calvente, reconoce en su currículum que ha trabajado durante casi seis años (entre 1999 y 2005) como “encargada” y jefa de personal de la sociedad que explota el Milady Palace.

Su currículum depara otras sorpresas: también sostiene que trabajó durante cinco años (desde 1986 a 1991) como “personal de confianza” y asistente del millonario y traficante de armas Adnan Khashoggi en Marbella. Sin embargo, los testimonios recogidos de varios antiguos empleados de La Baraka, la finca en la que veraneaba Khashoggi en los años 80, niegan categóricamente este extremo: jamás vieron allí a Calvente.

La candidata de Vox también asegura que desde junio de 2015 trabaja como autónoma en la compra-venta de obras de arte. Sin embargo, el certificado de vida laboral que ha aportado a la dirección del partido demuestra que, en dicho período, jamás ha cotizado como autónoma.

Fuente: OK Diario