Otra embustera: Una periodista feminista con cara de caballo dice que Trump la violó en 1995 en Nueva York
La periodista Elizabeth Jean Carroll asegura que el presidente de EE.UU., Donald Trump, la violó en 1995 en el probador de una conocida tienda de Nueva York, según relata en un libro que se publicará el mes que viene y que este viernes adelantó la revista «New York».
Carroll, conocida por su columna de consejos «Ask E. Jean» en la revista feminista ELLE, cuenta en el extracto que se encontró con Trump en los grandes almacenes Bergdorf en la calle 58 de Manhattan y que él le dijo «Hey, ¡tú eres esa señora de los consejos!», a lo que ella respondió: «Hey, ¡tú eres el magnate inmobiliario!».
Tras una breve charla, el ahora mandatario estadounidense le pidió «ayuda» para comprar un regalo a una «chica», ella accedió, y comenzaron una ruta por los grandes almacenes, buscando entre bolsos, sombreros, pieles y lencería.
Al llegar a la sección de lencería, Donald Trump le instó a probarse una de las piezas, ante lo que ambos juguetearon y ella le pidió que fuese él quien se pusiese la prenda.
De acuerdo con el relato de la mujer, cuando se cerró la puerta del probador, el multimillonario «me embistió, me empujó contra la pared, golpeándome la cabeza muy fuerte, y puso su boca sobre mis labios».
La mujer, en shock, actuó riéndose y empujándolo hacia atrás, pero él la agarró y la empujó de nuevo contra la pared y le bajó las medias, relata
«Al momento siguiente, todavía vistiendo su atuendo de negocio, camisa, corbata, traje de chaqueta y abrigo, se lo abre, se baja la cremallera del pantalón y, forzando sus dedos alrededor de mi zona íntima, empuja su pene a medias -o entero, no estoy segura- dentro de mí», narra la periodista.
La mujer consiguió zafarse en un encuentro que duró apenas tres minutos y en el que «no cree» que Trump eyaculara.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, negó hoy rotundamente las acusaciones y aseguró que ni siquiera la conoce, además de insinuar que la oposición demócrata está detrás de la denuncia y subrayar que no hay ninguna prueba del supuesto asalto.
«Respecto a la ‘noticia’ de E. Jean Carroll, que afirma que nos encontramos hace 23 años en Bergdorf Goodman: No he conocido a esta persona nunca en mi vida. Está intentando vender un nuevo libro, y eso debería dejar clara su motivación. Debería venderse en la sección de ficción», dijo Trump en un comunicado.
«Señora Carroll y New York Magazine: ¿No hay fotografías? ¿No hay vigilancia? ¿No hay vídeo? ¿No hay informes? ¿No había ningún empleado de la tienda cerca? Me gustaría dar las gracias a Bergdorf Goodman por haber confirmado que no tienen grabación de vídeo de ese supuesto incidente, porque nunca ocurrió», sentenció Trump.
Esta mujer tiene lo que se denomina “el síndrome de la cebra” : Está totalmente rayada, tiene cara de caballo y no hay nadie que la quiera montar.
Ahora Trump es el follador planetario número 1. Baja, todos con el culo contra la pared cuando salga el rubito por la TV. Lo único que falta es que salga una morirá denunciando a Franco cuando estuvo en Marruecos.
¡Qué mundo!
¿Se ha mirado al espejo? Antes una muñeca hinchable que usted.
Pajara con afán de notoriedad.
Si acusar sin pruebas les costará dinero y cárcel, veríamos como no tardarían 20 años en acordarse de las cosas.
Lo único que me consuela, es que en todas partes cuecen habas. El problema es que en España las cocemos todos los días a todas horas.
Saludos Patriotas Españoles.
A esa no la viola ni un pirado cargado de crack.
Pues sí que ha tardado en denunciar la violación.
Estaría esperando a ver si se repetía el milagro de que alguien la montase