Las dos Españas
No voy a referirme al transfondo de la célebre frase de Antonio Machado, que por desgracia continua vigente.
Voy a referirme al contraste que veo respecto a cómo está España económicamente hablando.
Si oímos hablar a los líderes de la izquierda populista, hay una hambruna infantil y un semi estado de pobreza en la ciudadanía terribles.
Sin embargo, me asomo a la “realidad” y veo:
Que somos el País de la Unión Europea con mayor número de “BMW” en circulación.
Aparte de esta marca “premier”, son numerosos los coches de otras altas gamas que circulan por nuestras ciudades y carreteras.
Conseguir mesa en restaurantes de nivel es difícil. Los hay, incluso, que tienen lista de espera de semanas!
Y echar un vistazo a los de nivel medio, nos lleva a la conclusión de que salir a comer o cenar fuera ya no es un lujo precisamente.
Las terrazas urbanas y chiringuitos de playa no están precisamente vacíos. Y el gasto promedio por cliente tampoco se reduce a una caña.
Los aviones y AVES llevan llenas sus clases preferentes. Y las turísticas, también.
No es aconsejable ir a ningún Hotel sin reserva previa. Y contra mayor sea su número de estrellas, más difícil será encontrar habitación.
Los Cruceros han dejado de ser lujos al alcance de unos pocos. Los hay hasta para familias enteras. Y se llenan!
Darse una vuelta por cualquier Mercadona u otros Super es ver una ingente cantidad de clientes con carritos llenos a rebosar y no precisamente sólo con productos de los baratos.
Grandes Almacenes y Centros Comerciales están llenos también a rebosar. Y en todos ellos el dinero fluye alegremente, sin ser millonarios sus visitantes medios.
Conciertos y demás eventos se llenan hasta la bandera. Y las veladas se alargan con copas y más copas.
Mayoritariamente con jóvenes que tanto “paro” sufren. Habría que preguntar como en la canción: “de dónde sacan para tanto como destacan?”.
Aunque pueda parecer que esto que relato es porque estamos en periodo vacacional, no es cierto.
Darse una vuelta en otras fechas por los sitios descritos y el panorama no varía.
No nos hagamos, pues, trampas al solitario.
La España de algunos políticos es una y la realidad muy otra.
“Cosas veredes, Sancho”.
Hoy es la inconsciencia de los españoles la que ha de helar el corazón.