El género es un accidente gramatical
Tanto los maridos como las esposas, como cualquier humano, carecen de “género”. Los humanos poseemos SEXO (algunos también lo practican, con seso y sin seso).
El género es un accidente gramatical que guarda relación con los sustantivos, los sustantivos, o nombres, pueden ser de género femenino o masculino, dependiendo de si se pueden hacer acompañar de los artículos determinativos “el” o “la”.
Por ejemplo: “casa” es femenino, ya que solamente puede ir acompañada del artículo “la”, y “edificio” es masculino, pues solamente puede ir acompañado del artículo “el”, que se sepa, ni “casa” ni “edificio” están sexuados, aunque en ambos se pueda practicar sexo, y generalmente, las mujeres cuando repudian y desahucian a sus maridos (y los expulsan de la vida de sus hijos, a la vez que impiden que participen en su educación y crianza) suelen apropiarse de ellos, ya sea una casa o un edificio, y el marido seguirá pagando la hipoteca.
Hay sustantivos bisexuales como “mar”: el mar, la mar; azúcar(que puede ir acompañado de adjetivo masculino o femenino: moreno, blanquilla).
“Agua” es palabra femenina pero usa artículo masculino: El agua ¿Accidente de transexualidad? En fin, hay accidentes y excepciones accidentadas. La “justicia” interviene cuando hay conflicto denunciado.